El Pleno del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife aprobó este martes, con los votos favorables del grupo de gobierno (CC-PP) y del concejal del CCN, y la abstención de PSC y Ciudadanos por Santa Cruz, el Presupuesto Municipal para 2009, que asciende a 222 millones, un 9% menos que en 2008. Después de la modificación de 150.000 euros más para Bienestar Social acordada este lunes por los grupos en la comisión contra la crisis y aprobada este lunes, el PSC renunció a debatir las 13 enmiendas que mantenían al presupuesto y que fueron rechazadas en la sesión plenaria, al igual que la defendida por Ciudadanos por Santa Cruz.
El concejal de Economía y Hacienda, Ángel Llanos, garantizó que estos presupuestos “realistas y estrictos” preparan a Santa Cruz “para plantarle cara a la crisis con éxito” y disponer del “músculo financiero” para atender a las necesidades de los ciudadanos “sin hipotecar” futuros ejercicios económicos. Reconoció que son “insuficientes, pero los máximos posibles” ante la crisis.
Entre los objetivos, citó garantizar el abono de los salarios al personal del Consistorio, generar la confianza en el sector privado, y aumentar el gasto social, al que se destinarán uno de cada tres euros.
De hecho, Servicios Sociales y Bienestar Comunitario, con un aumento del 5% y 63,6 millones, es el área con una mayor partida y representa el 29% del presupuesto. Le siguen las de Seguridad y Protección Civil (28,5 millones), y Administración General y Distritos (29,6 millones), que suponen un 13% del presupuesto, seguidas de Medio Ambiente (30,1 millones, 14%) e Infraestructuras (24,5 millones, 11%).
Gastos financieros (13,8 millones y un 6% de representatividad), Servicios Públicos (11,4 millones, 5%), Transportes (11,4 millones y 5%), Órganos de Gobierno (5,1 millones, 2%), y Empleo y Desarrollo Económico (4,1 millones, 2%), completan la distribución de las cuentas para 2009.
Llanos, que se mostró dispuesto a atender las peticiones de la oposición cambios de estructura presupuestaria, precisó que las cuentas recogen una financiación adicional de 5,3 millones, un endeudamiento “muy moderado” e inferior al 0,2% que el Ministerio de Economía y Hacienda autorizará a las administraciones locales.
Destacó el “ejercicio de austeridad sin precedentes” en los gastos corrientes, con una reducción de 22 millones y recortes de entre el 15 y el 50% en actividades recreativas, culturales, deportivas, de protocolo, fiestas y publicidad. Además, destacó que, por segundo año consecutivo, se congelan las tasas e impuestos municipales, y se contemplan bonificaciones fiscales para determinados colectivos sociales.
En materia de ingresos, precisó que los impuestos indirectos descenderán en 2,6 millones con respecto a 2008, mientras que las tasas municipales pasarán de 16,7 a 18,2 millones, las transferencias procedentes de otras administraciones (91,4 millones) se reducen en 900.000 euros y los ingresos patrimoniales aumentarán en 200.000 euros.
''Continuistas, virtuales y sin respuestas''
Los grupos del PSC y de Ciudadanos por Santa Cruz coincidieron en que las cuentas no prevén el gasto suficiente para atender a las necesidades sociales y reprocharon la actitud del alcalde, Miguel Zerolo, ante la “falta de transparencia” de Llanos y las formas en la negociación para intentar alcanzar el consenso sobre las 26 enmiendas presentadas. Ambos también desmintieron la reducción de la presión fiscal, que dijeron ha aumentado más de un 35% en los últimos cuatro años.
El portavoz del PSC, Ramiro Cuende, dijo que los presupuestos “carecen de ideas modernas y de futuro” y responden a la “falta de programa” del grupo de gobierno, lo que lleva a unas cuentas “continuistas, malas y tristes”, que “las ha arreglado el ínclito Zapatero”, con los 39,1 millones que llegarán del Fondo Estatal de Inversión Municipal.
Reclamó la creación de una Concejalía de Modernización y Estrategia para superar la política económica del grupo de gobierno, al que puso como ejemplo la acción “moderna” de otros ayuntamientos incluso gobernados por formaciones conservadoras del mismo signo político. Pese a todo, expresó la colaboración de su grupo para atender a las necesidades de los ciudadanos y justificó la abstención socialista “por responsabilidad y solidaridad” en estos momentos económicos ante unas cuentas que “no podemos apoyar”.
En esta línea, el concejal de Ciudadanos por Santa Cruz, Guillermo Guigou, dijo que las cuentas “no cumplen con los ciudadanos”, no están preparadas para afrontar la crisis y podrían contener un aumento del 15% el gasto social si se aplicara austeridad real sobre el grupo de asesores y personal de confianza.
Sostuvo que las cuentas “se han construido desde intereses personales y partidarios, y en contra de los intereses generales” y reclamó un “cambio profundo” de la política presupuestaria, basada en un modelo económico “agotado” y en modificaciones presupuestarias e incumplimientos. Como ejemplo, apuntó que en 2008 se dejaron de gastar 4.000 millones de las antiguas pesetas y en ejercicios anteriores no se invirtieron 65 de cada 100 euros.
Así dijo que este presupuesto “virtual pretende un lavado de cara y una campaña de marketing para esconder la realidad”, que es que no se atiende a las necesidades ciudadanas y que en los últimos cuatro años se han fijado aumentos del 50% y 35% en los impuestos directos e indirectos, respectivamente.
El concejal del CCN, Ignacio González, reconoció la contención en los gastos corrientes y de personal, pero criticó el escaso aumento en gasto social y en inversión, donde destacó que se podrá actuar “gracias a Zapatero”, porque sin las partidas del Fondo Estatal este capítulo sería “prácticamente inexistente”. Reclamó una remodelación del grupo de gobierno que potencie las áreas de Asuntos Sociales, Economía y Empleo, y que los presupuestos se ejecuten “correctamente y en tiempo”.
''Prudentes, ajustados y austeros''
El portavoz del PP, Jaime Hérnández-Abad, afirmó que este presupuestos es “el único posible, el mejor en estos momentos, realista y ajustado, prudente y dando prioridad al bienestar de los vecinos”.
El portavoz de CC, José Alberto Díaz Estébanez, apeló a “no caer en triunfalismos, ni en demagogias catastrofistas” ante unas cuentas “que no son las que querríamos traer”, pero están condicionadas por unas circunstancias económicas, “que tampoco son las que nos gustaría vivir”.
Defendió que se parte de un marco “restrictivo” de ingresos y, pese al “recorte” en gastos no prioritarios, el margen de maniobra es “escaso”. También previó que las cuentas sufrirán modificaciones durante el ejercicio, como ya ocurrió en el de 2008, una herramienta económica a la que “no hay que tener miedo”, dijo.