El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, del Partido Popular, ha expresado públicamente su desacuerdo con la polémica fiesta del Toro de la Vega, una tradición que califica de “crueldad” y que considera que ofrece una “mala imagen para España”.
“Pienso que el Toro de la Vega es una barbaridad y una crueldad hacia un animal indefenso. Una mala imagen para España. Triste”, escribió este jueves por la noche en su cuenta personal de Twitter Bravo de Laguna, que se encuentra estos días temporalmente apartado de sus responsabilidades tras pasar por una operación.
Su mensaje, que va acompañado de una foto del toro cuando es alanceado, ha sido marcado como favorito, hasta este viernes por la mañana, por una veintena de personas, entre ellas dos de los consejeros de su gobierno: Auxiliadora Pérez, titular de Presidencia, y Antonio Hernández Lobo, de Cooperación Institucional y Solidaridad.
Bravo de Laguna no es el único cargo del PP en Canarias que durante esta legislatura ha criticado abiertamente festejos taurinos. El diputado autonómico Miguel Cabrera Pérez-Camacho afirmó en septiembre de 2012 que le desagradaba “profundamente” que se emitieran corridas de toros por TVE y que se utilizase dinero público para un espectáculo basado en la crueldad con los animales.
“Respeto los gustos de cada uno, pero la emisión desde un medio público de espectáculos de maltrato a los animales me desagrada profundamente”, declaró el diputado del PP, quien lamentó que se siga identificando a España con el maltrato de animales.
Diputado en el Congreso entre 1996 y 2000, Pérez-Camacho fue promotor en Canarias de la Ley de Protección de los Animales, por la que desde 1991 están prohibidos en las islas los espectáculos, peleas o fiestas que supongan maltrato, crueldad o sufrimiento para los animales.
La dirección del PP en Canarias se desmarcó entonces de la opinión de este diputado, que consideraba “personal”.