El Cabildo de Gran Canaria ha declarado de emergencia la obra de reposición de un muro y de un tramo de calzada de la carretera GC-700 que une Guía con Moya, afectado por las intensas lluvias del pasado noviembre y cuyos daños afectan a la seguridad de un grupo de viviendas ubicadas debajo del muro.
El tramo afectado es de unos 50 metros y se encuentra sobre los núcleos de viviendas de Casas de Aguilar, El Palmital, La Dehesa y San Juan, por lo que la seguridad de las casas ha quedado afectado por la inestabilidad del muro, que incluso ha sufrido desprendimientos de parte de su material que ha alcanzado la fachada trasera de una de las viviendas, cuyo inquilino ha tenido que desalojar parcialmente.
Además, la urgencia en las obras también se deben a que como consecuencia del hundimiento la vía se cerrado parcialmente al tráfico, ya que permanece abierta regulada por semáforos para el paso alternativo de vehículos, pero que no permite el paso de guaguas del transporte público regular o de transporte escolar.
El presupuesto de los trabajos es de 190.000 euros e incluyen incluyen la demolición del actual muro y la realización de uno nuevo, la reposición de la calzada y la repavimentación, la colocación de las barreras de seguridad y el repintado de las marcas viales.
Estas obras pretenden evitar el desplome completo del muro, por lo que ha sido declarada la emergencia ante la necesidad de actuar cuanto antes, como ha indicado en un comunicado del Cabildo de Gran Canaria. El consejero de área, Ángel Víctor Torres ha alertado de que, “si el material continúa deslizándose, podría impactar contra la cubierta y los elementos estructurales de la casa”.
La actuación tendrá un plazo de ejecución aproximado de dos meses siempre que las condiciones meteorológicas lo permitan. Los perfiles en redes sociales de Facebook y Twitter @CarreterasGC informarán del desarrollo de los trabajos y de cualquier incidencia que se produzca en la zona.