El Cabildo de Gran Canaria ha decidido prorrogar en un mes la resolución del expediente de declaración del Hotel Oasis Maspalomas como Bien de Interés Cultural (BIC) y ha encargado un informe externo al arquitecto conservador del Parlamento de Canarias que trabaja actualmente en Tenerife, José Miguel Márquez.
El presidente insular, José Miguel Bravo de Laguna, afirmó ayer que este nuevo plazo, que corresponde a la “última prórroga que podemos hacer”, no produce unos “daños irreparables a los inversores privados”, que tenían previsto comenzar una hipotética demolición del edificio el 7 de abril.
“Serían tres semanas como mucho de retraso”, indicó Bravo de Laguna. Sin embargo, la cadena balear Riu advirtió recientemente de que la empresa sufrirá “graves perjuicios económicos” si se aplazara la decisión del Cabildo de Gran Canaria de incoar, o no, un expediente de declaración del hotel Oasis como BIC.
Esta declaración paralizaría los planes de derribo de la cadena hotelera. Un tema “polémico, con división de opiniones” por el que Bravo de Laguna dijo no tener una opinión formada y aseguró mantenerse a la espera de la conclusión de los informes.
El presidente del Cabildo valoró la “gran solvencia” de Márquez y aseguró que “somos absolutamente escrupulosos con la independencia de los técnicos, por eso encargamos” los expedientes, en referencia a que no se les va a “condicionar”. La Administración grancanaria ha enviado un escrito al Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana invitándole a sumarse al nuevo plazo.