Unas cinco mil personas formaron este domingo una cadena humana en la orilla de la Playa del Inglés para reiterar su rechazo a la construcción de una cárcel en Juan Grande, en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, al sur de Gran Canaria.
El Consejo de Vecinos de Castillo del Romeral organizó este acto de protesta, al que se sumaron otros grupos de Telde, Mogán y Vecindario, que fue secundado por numerosos bañistas.
Al mismo tiempo, varias embarcaciones de recreo se acercaron a la orilla para desplegar sus pancartas entre las que se podían leer consignas como “turism yes, macroprison no”, con la intención de informar a los turistas de sus reivindicaciones.
La cadena se inició a las 13.00 horas en el Centro Comercial Anexo II y transcurrió por la orilla hasta perderse en las Dunas de Maspalomas, sin que se registrasen incidentes.
Además, los vecinos aprovecharon para rechazar otras instalaciones “negativas”, como la regasificadora, el cierre del vertedero y el control de emisiones de la central térmica.
En cuanto a la “macrocárcel”, los vecinos insisten en que su construcción es “ilegal al carecer de todos los permisos necesarios, originando múltiples problemas medioambientales y causando entre la población gran alarma social”.
Según los vecinos, “el futuro en el sur va a ser muy diferente”, ya que la construcción de la cárcel “repercutirá, de forma indudable, en el turismo”.
Asimismo, varios portavoces del Consejo destacaron la predisposición de los manifestantes a seguir con su actitud contraria a la instalación del penal, y anunciaron nuevas reuniones con el Ayuntamiento, así como una manifestación, el próximo 12 de septiembre, en Las Palmas de Gran Canaria.