Dos carriles de la GC-1, a la altura del centro comercial de Ikea, en dirección sur, están cerrados al tráfico por acumulación de agua en la calzada que impide la circulación de vehículos. Esto está provocando importantes retenciones de tráfico,según acaban de informar técnicos del Cabildo de Gran Canaria.
Las retenciones de tráfico para los conductores que pretenden incorporarse a la GC-1 desde Salinetas, Arinaga o Melenara son de hasta 30 minutos, según han confirmado a esta Agencia testigos presenciales.
El Archipiélago, excepto Lanzarote o Fuerteventura, se encuentra en alerta naranja por riesgo de lluvias que pueden ser localmente fuertes.