Chillida quería una obra ''libre de corrupción''

La Comunidad Científica de Canarias ha comenzado a firmar un manifiesto en contra del proyecto de la montaña majorera de Tindaya y entre los argumentos han esgrimido que el escultor Eduardo Chillida abogaba por un “proyecto limpio y respetuoso con el medio, y libre de sospechas de corrupción o negocios ilícitos”.

En un manifiesto, los argumentos expuestos están encabezados en la defensa del Monumento Natura como “uno de los espacios naturales con mayores niveles de protección legal del Archipiélago por sus valores naturales y culturales”.

Además han insistido en que especialistas de distintas ramas consideran que la obra es incompatibles con la protección de Tindaya y que además tales valores podrían quedar desvirtuados.

“Prueba de ello es que los promotores del proyecto -Gobierno de Canarias y Cabildo de Fuerteventura- ya han dejado de proteger y documentar dichos valores, en los cuales no se ha invertido un solo euros, ni se han favorecido los estudios científicos que profundicen en el conocimiento y la difusión de valores patrimoniales de la montaña”, siguen enumerando en el manifiesto.

En este sentido, han apuntado también que actualmente es evidente el abandono y expolio de los restos arqueológicos, la negativa a delimitar la zona BIC, la indefensión de algunas especies, como reconoce el propio proyecto. Se lamentan además que en estos años “solo se ha promocionado la obra de Chillida con un escandaloso gasto o desaparición de 25 millones”.

“Consideremos que el proyecto actual no tiene que ver con la idea original de Chillida”, ha apuntado para criticar que se siga engañando con la viabilidad del proyecto -“derrochando dinero público”- y en donde hay dudas sobre la viabilidad, la insostenibilidad del proyecto, así como las incertidumbres legales existentes y las más de 40 condiciones que la Comisión de Ordenación del Territorio y el Medio Ambiente de Canarias ha puesto al Proyecto Monumental y la Evaluación Ambiental de Tindaya.

Con estos argumentos, la Comunidad Científica insta al Gobierno de Canarias, al Parlamento y a las fuerzas políticas que retiren el proyecto y “trabajen en la recuperación y potenciación de los verdadero valores de ese emblema de nuestro patrimonio natural y cultura, que genere de una vez por todas beneficios culturales y económicos a los habitantes de la isla y no falsas promesas”.