Enrique Hernández Bento, mano derecha del exministro José Manuel Soria en el Ministerio de Industria, Energía y Turismo del Ejecutivo de Rajoy como subsecretario de Estado, y exdelegado del Gobierno en Canarias, será el próximo candidato de Ciudadanos a la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria, según ha podido saber Canarias Ahora de fuentes del partido de Albert Rivera en Madrid.
Hernández Bento, que tras la dimisión de José Manuel Soria por sus empresas en el paraíso fiscal de Jersey compitió sin éxito por la presidencia del PP de Canarias con el actual líder, Asier Antona, también terminó rompiendo relaciones con el que fuera su padrino político en Madrid y en Canarias. Y se dio de baja en el PP.
Ahora, Hernández Bento lidera una operación de escindidos del PP que, en contacto directo con la Secretaría de Organización de Ciudadanos, prepara un gran desembarco de populares relevantes que han roto vínculos con el partido. Y todo ante el estupor de cargos y militantes naranjas en las Islas que ven cómo se les desplaza por lo que la dirección nacional considera falta de tirón electoral y acción política. Sin que haya habido explicaciones internas.
Hernández Bento no llega solo a Ciudadanos desde esos rescoldos del PP. Lo hará, entre otros, con José Miguel Bravo de Laguna, presidente del Cabildo Insular de Gran Canaria en el anterior mandato en las filas del PP, y su hijo Lucas Bravo, el consejero de Deportes que contrataba a su novia y que dos años después de dejar el cargo de gobierno se convirtió en su actual socio para eventos deportivos. Justo cuando consideró que vencían los dos años de incompatibilidad por cargo público.
Los Bravo tienen el cometido de rentabilizar el indudable tirón electoral del padre en las listas del Cabildo de Gran Canaria, que liderará para Ciudadanos José Miguel Bravo de Laguna en 2019. En 2015, Bravo padre rompió con el PP siendo aún presidente del Cabildo y se presentó en 2015 en solitario como Unidos por Gran Canaria (UxGC), obteniendo dos actas. De esa escisión, el PP vio cómo Nueva Canarias le superaba en votos y le arrebataba la presidencia de la corporación.
El acuerdo ya cerrado y pendiente de hacerse público a la vuelta del verano podría retrasarse por la polémica de las contrataciones de Lucas Bravo a su amiga íntima Noelia Pérez, de la que ahora es socia, pero el tirón electoral de José Miguel Bravo, que también ha estado en contacto con Coalición Canaria (CC) para alianzas antes de las elecciones de 2019, prevalece en Ciudadanos para que la operación liderada por Hernández Bento llegue a buen puerto en otoño, según fuentes cercanas al jefe nacional naranja en la negociación, Fran Hervías, secretario de Organización.
En todo este mercado de fichajes político del verano, los Bravo de Laguna sí que han trasladado a sus interlocutores de Ciudadanos el interés de Coalición Canaria por hacerse con sus servicios, y electores. Tanto, que sobre la mesa Coalición llegó a ofrecer la presidencia de la Autoridad Portuaria de la provincia de Las Palmas a José Miguel Bravo como una opción que se diluyó en cuanto el PP inició contactos para el pacto regional con CC, negociaciones que no han fructificado.
De ahí que vuelva a ser Ciudadanos el destino de los Bravo. Hasta el punto que desde los negociadores del desembarco se haya vetado la entrada en la operación de otros socios locales de José Miguel Bravo de Laguna, como el grupo de la ciudad de Telde liderado por el exteniente de alcalde Guillermo Reyes, Ciudadanos por el Cambio (Ciuca), y su aliada en el municipio de Mogán, la alcaldesa Onalia Bueno (Ciuca), prácticamente ya en las filas electorales de CC. Y ambos con pasados bajo lupa judicial. Los Bravo no han puesto objeción a ese doble veto.
En la misma jugada de refuerzos de carteles electorales también se ha embarcado la que fuera presidenta del PP en la isla de Fuerteventura, Águeda Montelongo, enfrentada, como Hernández Bento y José Miguel y Lucas Bravo, al actual líder de los populares en Canarias y sustituto de José Manuel Soria, Asier Antona.
La líder conservadora majorera, exculpada por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias por el caso Patronato (suplantación de nombres para que altos cargos del PP se alojaran en hoteles de Fuerteventura a costa del erario público), tendrá que elegir entre encabezar la lista naranja al Parlamento de Canarias por la isla de Fuerteventura o ser la candidata a presidenta del Cabildo de esa isla.
Las normas internas de Ciudadanos imposibilitan que una misma persona ostente dos cargos públicos o se presente en más de una lista, del mismo modo que si el partido tiene menos de 400 afiliados en algún territorio de los que denomina delegaciones, como es el caso de Canarias, las designaciones de candidatos no tienen la obligación de pasar por el filtro de asambleas y primarias.
Así es lo que las fuentes consultadas consideran el relanzamiento de Ciudadanos en Canarias, donde la representación pública se reduce a varios ayuntamientos y en especial al de Las Palmas de Gran Canaria, con su portavoz Beatriz Correas como la principal perjudicada de este movimiento de fichas. Este periódico no ha podido contactar a lo largo de este martes con la portavoz municipal naranja.
Ciudadanos sí que tuvo cierto tirón nacional con la obtención de dos actas de diputados, uno por cada provincia, Melissa Rodríguez por Santa Cruz de Tenerife, con visible presencia mediática, y Saúl Ramírez por Las Palmas.
El actual sistema electoral perjudicó notablemente a Ciudadanos en las elecciones autonómicas regionales. La formación sobrepasó los 54.000 votos y no obtuvo ni una sola acta en la Cámara autonómica.