El presidente Fernando Clavijo (CC) ha argumentado este viernes que el reparto aprobado para el Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) responde a la filosofía de que “no deben existir islas de dos velocidades” y parte de la necesidad “de hacer las cosas de forma diferente”.
“Eso solo se consigue teniendo en cuenta que no todos somos iguales, que tenemos diferencias, que el modelo económico de Lanzarote no es el mismo que el de La Gomera”, pero también uniendo esfuerzos “para planificar juntos el futuro de otra manera”, ha señalado Clavijo, en el acto de firma de los compromisos del Fdcan.
La cita ha contado con la presencia de los máximos representantes de los siete cabildos, salvo el de Gran Canaria, que no ha estado representado ni por su presidente ni por ninguno de sus dos vicepresidentes, sino por el consejero Carmelo Ramírez (NC), quien ha aprovechado el acto para denunciar que se ha hecho un “reparto clientelar” y para acusar a Clavijo de haber prometido proyectos a aquellos ayuntamientos que rompieran la unidad de criterio insular (en alusión a los consistorios de Mogán, San Mateo y Firgas)
Ramírez ha querido dejar claro que el Cabildo de Gran Canaria no comparte el reparto que se ha hecho (por el que recibirá 167 millones de euros distribuidos en cuatro años) desde el propio acto físico de la firma, en el que ha exclamado: “¡Por imperativo legal!”.
Su contraparte en esa rúbrica, la consejera de Hacienda, Rosa Dávila (CC), se lo ha tomado con humor y le ha respondido: “Si lo prefieres, yo tampoco firmo”. Y, a su espalda, la presidenta del Cabildo de El Hierro, le contestaba en igual tono distendido: “Si no lo quieres tú, nos lo repartimos entre los demás”.
Aunque la anécdota se produjo entre sonrisas y muestras de buen humor, ya adelantaba cuál va a ser la postura del Cabildo de Gran Canaria, explicada luego por Ramírez: la isla acepta los recursos, porque considera que son importantes, pero sigue discutiendo el reparto e, incluso, no descarta llevarlo a los tribunales.
El consejero grancanario sostiene que el presidente del Gobierno ha conseguido su propósito de repartir el Fdcan “conforme a la triple paridad” (el criterio de asignación de escaños en el Parlamento de Canarias, que sobrepondera a las islas menos pobladas, para equilibrar su peso con Tenerife y Gran Canaria), cuando los fondos deberían haberse distribuido de mismo modo que los ingresos del REF, ligados preferentemente a la población.
Los seis presidentes de cabildos que sí comparten los criterios de reparto le han respondido con mayor o menor intensidad: Carlos Alonso, de Tenerife (CC), ha “tenido la mano” a su homólogo de Gran Canaria, Antonio Morales (NC), para que se reincorpore al consenso; Marcial Morales, de Fuerteventura (CC), ha pedido que, “como demócratas”, se respete “la decisión de la mayoría”; y Pedro San Ginés, de Lanzarote (CC), ha censurado la “deriva insularista” que percibe en los dirigentes de Nueva Canarias.
En su discurso durante el acto de firma, Clavijo se ha declarado consciente de que “a todos” los cabildos y ayuntamientos les hubiera gustado “recibir algo más”, aunque también ha recalcado que era preciso atender a criterios de “generosidad” y “solidaridad”.
“La finalidad del Fdcan es contribuir a que todos los ciudadanos de Canarias tenga la oportunidad de desarrollar su proyecto de vida sin salir de su isla”“, ha añadido.
Desde su mismo partido, el presidente del Cabildo de Fuerteventura ha opinado que, con el reparto de fondos finalmente acordado, “todas las islas salen ganando”, por lo que el día de hoy “es magnífico para Canarias, fruto del trabajo de todos”.
Comparte su opinión el presidente insular de Lanzarote, que sostiene que, incluso la isla que dice sentirse maltratada, Gran Canaria, sale ganando respecto a los criterios que propone aplicar.
“Comienza una década de esperanza para las siete islas”, ha sentenciado Pedro San Ginés.
Por su parte, el presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana (PSOE), ha confiado en que su isla pueda aprovechar los recursos que va a recibir para seguir avanzando y para recuperar terreno perdido, por lo que se ha declarado feliz.
Sin embargo, el más feliz de todos este viernes era el presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo (ASG), que fue el primero en romper el silencio con que se firmaban los acuerdos con un “¡Bendito momento. Por fin ha llegado, llevo medio año esperándolo”.
Luego, ante los periodistas, Curbelo ha pedido a todos los cabildos, ayuntamientos y fuerzas políticas “trabajar en positivo”, incluso a aquellos que se han opuesto a que los recursos del Fdcan vayan a las administraciones locales y que ahora “se tendrán que arrepentir”.
“Canarias hay que concebirla tal y como es. Vivimos en islas. La isla es una realidad que no podemos eludir, por lo que a todos nos toca construir Canarias desde las islas”, ha defendido.
Por su parte, la presidenta del Cabildo de El Hierro, Belén Allende (CC), ha considerado que este viernes su isla “se sube a una Canarias de una sola velocidad”, gracias a un Gobierno que ha tratado de “nivelar y equilibrar diferencias”.
El presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso (CC), ha expresado su convencimiento de que el día de hoy marca “el inicio de muchos sueños”, los sueños de muchas personas que aspirar a tener las mismas oportunidades “vivan en la isla en la que vivan”.
Alonso ha recordado a los críticos con el Fdcan que si se hubiera aplicado estrictamente el REF, las Islas solo hubieran recibido uno de cada tres euros, mientras que ahora va a ingresar “el 100 %”, atendiendo a las “sigularidades de cada una de ellas”.
El presidente tinerfeño ha recordado, además, que Canarias acude regularmente a Bruselas y a Madrid a defender que no se la puede tratar igual que a otras regiones, sino teniendo en cuenta sus especiales condiciones de lejanía e insularidad.
“Si nosotros planeamos eso fuera, ¿cómo no vamos hacerlo en Canarias”, ha añadido, “hay que dar más al que más necesita”.
Alonso considera que el presidente del Cabildo de Gran Canaria “tendrá que hacer examen de conciencia” y decidir si “a partir del 2 de enero” se suma a los demás cabildos. Él, por su parte, le ha tendido “la mano de Tenerife” para que así sea.