La diputada autonómica de Podemos, Asunción Delgado, ha acusado este miércoles al “aparato” de la formación morada en Canarias de utilizar la política como una “finca particular” y “secuestrar” la dinámica de participación en las islas.
En una entrevista concedida a la Cadena Ser ha identificado al aparato con la secretaria general Meri Pita, la portavoz parlamentaria, Noemí Santana, la diputada autonómica Concepción Monzón, y la secretaria de Organización, Conchi Moreno, más un grupo de “adláteres” que las necesitan porque “viven” de ese aparato y conforman su “soporte logístico”.
Delgado ha comentado que esa cúpula dirigente proviene de una sindicato y una corriente, Canarias por la izquierda, y “han querido que todos los demás” sean lo mismo, pero en su opinión, “buscar la unidad no es uniformidad, sino convergencia”.
Además, ha destacado que “han echado” a la gente vinculada al 15-M, subrayando que para lograr una unidad mayor en torno a Podemos se debe ser “más generoso”, soltar “egos”, y dejar atrás “estructuras rígidas” que funcionan como una trinchera.
Sobre la convivencia del grupo parlamentario, ha señalado que es “respetuosa” y se comparte trabajo para elaborar propuestas e iniciativas, si bien en su caso concreto, ha confesado que se ha sentido “maltratada”, pues como portavoz de la Comisión de Ordenación Territorial, no se le deja participar en encuentros con colectivos o en medios de comunicación.
“No me han apoyado mediáticamente en el partido y el aparato favorece más a unos diputados más que a otros”, ha resaltado.
Apoya la doble militancia
Delgado espera que el proceso abierto para la Secretaría General del partido “sirva para asentar, reflexionar y trabajar de verdad” por una nueva dirección política que “integre” y “busque puntos en común” para crear un programa que recupere a los que se “sintieron ilusionados” con Podemos.
Además, ha señalado que siempre se ha sentido de Sí se Puede y Podemos y eso “no es una esquizofrenia ni una contradicción”, porque en Sí se Puede, por ejemplo existe doble militancia, asociaciones de todo tipo e iniciativas municipalistas, “y en ningún momento se ha pretendido que nadie se diluya cuando se llega a Sí se Puede”.