Conocemos a los más mediáticos: José Manuel Soria, Victoria Rosell, Pedro Quevedo, Sebastián Franquis, Ana Oramas, Alberto Rodríguez… Pero en total son 15 los diputados que representan a Canarias en el Congreso y en Madrid han tenido que presentar sus autobiografías y currículum vítae para que sean cotejados por los ciudadanos y la opinión pública a fin de comprobar su veracidad. Todos se muestran parcos o concisos y la mayoría poco transparentes. Esto es lo que escribieron.
Matilde Asian (PP) se llama en realidad “Matilde Pastora Asian González” y tiene 60 años. Va a cumplir su segundo mandato como política, pero en realidad es “inspectora de Hacienda del Estado, auditora de cuentas, miembro del Instituto de Censores Jurados de Cuentas y máster en Alta Dirección en el Instituto Bravo Murillo”, según su relato. “Ha ocupado diversos cargos”, señala la diputada en tercera persona y los enumera mezclando los políticos y profesionales: “Presidenta Zona Especial Canarias, viceconsejera de Economía y Asuntos Económicos con la Unión Europea en el Gobierno de Canarias y profesora asociada en la Universidad de Las Palmas”.
El socialista Chano Franquis aparece en su ficha como “Sebastián Franquis Vera, de 54 años, Diplomado en Relaciones Laborales”. Es uno de los pocos parlamentarios que posee página web y a ella remite. Allí se comprueba que es un caso de longevidad política sin apenas precedentes: se afilió a los 15 años, a los 22 ya tenía un cargo orgánico y con 23 fue el concejal más joven de Las Palmas de Gran Canaria. Con 38 años se retiró pero solo durante 8 años, y regresó de nuevo para quedarse. De su vida profesional al margen de la política especifica que su diplomatura es “por la Escuela Social de Tenerife, estudios que cursó en el Centro de Estudios Sociales de Las Palmas”.
Vicky Rosell (Podemos) es en el Congreso “María Victoria Rosell Aguilar”, de 47 años, “licenciada en Derecho y magistrada”. Es la única que consigna una segunda lengua: “Idioma inglés”.
José Manuel Soria López (PP) aclara poco más: acaba de cumplir 58 años, está casado, tiene dos hijos y es “licenciado en Ciencias Económicas (U.A.M), técnico Comercial y Economista del Estado”. Y añade: “ministro de Industria, Energía y Turismo”, aunque le falta especificar que lo es en funciones.
Pedro Quevedo (Nueva Canarias) va a cumplir en breve 60 años y será su segunda legislatura: “Casado, licenciado en Medicina y Cirugía, profesor asociado de Salud Pública en la ULPGC” es su currículum profesional. Y añade el político: “portavoz del Gobierno Canario (2000-2003), diputado en el Parlamento de Canarias por Gran Canaria, consejero de Políticas Sociales y Sociosanitarias del Cabildo de Gran Canaria, concejal del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria”.
Alberto Rodríguez (Podemos), 34 años, al que han hecho célebre a su pesar por sus rastas, pone que es “técnico superior en Química Ambiental, obrero industrial y operador en refinería de petróleo”. También se define por su “participación activa en movimientos sociales de la isla de Tenerife (derechos sociales, civiles, ambientales, etc) y en el movimiento obrero como representante sindical de mis compañeras y compañeros”.
Ana Oramas (CC) figura como “Ana María González-Moro” de 56 años. Va a ser su cuarta legislatura (16 años como diputada), casada, una hija. Licenciada en Ciencias Económicas por la Universidad de La Laguna, directora de la Sociedad de Garantías Recíprocas de Tenerife y alcaldesa de San Cristóbal de La Laguna es lo que figura como currículum laboral. Y para los más curiosos remite a su web. Ahí sí permite conocer algo más: “Me gusta mucho leer: desde novela histórica a best sellers, poesía, ensayo político, libros de cocina… También cada día la prensa local y nacional, y soy forofa de la radio: me levanto y me acuesto con la radio puesta. Y por tradición familiar no sólo me gusta la cocina sino que he sido ayudante de mi madre en su Escuela de Cocina, y se me da bastante bien. No he podido viajar todo lo que he querido por mis ocupaciones políticas. Pero me apasiona, sobre todo Latinoamérica. He visitado Guatemala varias veces, Venezuela, Brasil y Colombia. También he estado en Kenia, en Jordania e Israel. Y he hecho algunas escapadas a ciudades europeas”.
Saúl Ramírez (Ciudadanos) va a cumplir 40 años, está casado y tiene un hijo. “Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas (UOC) y diplomado en Gestión y Administración Pública (Universidad Complutense)”, es su formación.
Guillermo Mariscal (PP) es mucho más escueto aunque en esta legislatura cumplirá 16 años como diputado (4 legislaturas) de los 41 años que tiene. “Licenciado en Derecho. Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Abogado”, escribe como breve autobiografía.
Meri Pita (Podemos) es en el Congreso “María del Carmen Pita Cárdenes”, de 57 años, “gestora procesal y secretaria general de Podemos Canarias”.
La palmera Elena Álvarez (PP) es en su ficha “María Elena Álvarez Simón, de 43 años, abogada y concejal del Ayuntamiento de Breña Baja. No hay más. Y Melisa Rodríguez (Ciudadanos) solo desvela que va a cumplir 30 años, que es arquitecta Superior (Universidad Politécnica de Cataluña), máster en Energías Renovables (Universidad Europea de Canarias) y diseñadora de joyas (marca propia Lepa punca). Solo su declaración de la renta revela que la miembro del Comité Ejecutivo Nacional de Ciudadanos y portavoz de Ciudadanos en las Islas Canarias estaba en paro.
Pablo Matos (PP) escribe que va a cumplir 60 años, que esta legislatura será su cuarta (16 años), que es divorciado, tiene dos hijas “y es licenciado en Derecho por la Universidad de La Laguna, asesor Jurídico de Empresas por el Centro de Estudios Tributarios y Económicos de Madrid”. Entró en política hace 21 años como “concejal de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife”. Y nada más.
La socialista tinerfeña Tamara Raya es en Madrid “María Tamara Raya Rodríguez”, de 43 años, nacida en Puerto de la Cruz y con una “diplomatura en Ciencias Empresariales (ULL), máster en Dirección y Administración de Empresas y directora de Recursos Humanos”, además de concejala del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz.
Tampoco hay mucho más de Francisco Hernández Spínola. El saavedrista y apparátchik socialista más conocido del Archipiélago se limita a decir que tiene 58 años, que está casado con tres hijas y que es “licenciado en Derecho, funcionario del Cuerpo Superior de Administradores de Canarias” y fue “secretario general de la Presidencia del Gobierno de Canarias” en 5 años discontinuos. La prensa aclara la opacidad: “Carne de oposición en Canarias, aunque subsecretario del Ministerio de Administraciones Públicas con Jerónimo Saavedra. Nadie como él encarna la figura del aparato. Consejero auditor de la Audiencia de Cuentas, tras la abrupta ruptura con López Aguilar antes de que este último volara a Bruselas para hacer las Europas, fue rápidamente acogido bajo la capa protectora del hombre tranquilo, José Miguel Pérez. Residente en Tenerife para llevar a cabo sus estudios, nació en Arrecife (Lanzarote) en una conocida familia de la isla de los volcanes. Su padre es el maestro de varias generaciones de lanzaroteños Pedro Hernández Cerdeña, fundador del Orientación Marítima, un mítico club de fútbol en el que militó de niño. En cuanto a su madre, su apellido entronca con la vieja burguesía lanzaroteña”, escribió La Provincia en una semblanza. Y muchos de los diputados canarios deberían actualizar y ampliar las suyas.