LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 3 (EUROPA PRESS)
Las cajas rurales duplicarán este 2010 su 'hucha' particular para afrontar posibles rescates de entidades con problemas, pasando de los 300 millones actuales a los 600 millones de euros, a lo que habría que sumar los otros 600 millones de euros que conforman el fondo de garantía de depósitos que gestiona el Banco de España.
De esta forma, en 2010 las 73 cajas rurales tendrán a disposición de aquellas entidades que puedan necesitarlo 1.200 millones de euros, lo que supone el 2 por ciento del activo total de estas entidades que aglutinan 60.000 millones de euros, en torno al 5 por ciento del sistema financiero español, según avanzó hoy el director general de CajaSiete, Fernando Berge.
Berge explicó que el sector de las rurales no va a protagonizar ningún proceso de concentración similar al de las cajas de ahorros y, mientras en éstas prevé que todos los activos acaben en torno a 15 grandes grupos, en las cajas rurales no vaticina ninguna reducción significativa del número de entidades.
En este sentido, comentó que el proceso de concentración de las cajas de ahorros no acabará el 30 de junio --la fecha límite que ha dado el Banco de España para que las entidades con problemas puedan acudir a las ayudas públicas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB)-- sino que tendrá una segunda fase donde se reducirá más el número de grupos hasta ese entorno de las 15.
El director general de CajaSiete explicó que las cajas rurales ya iniciaron un proceso similar al de agruparse en torno a los Sistemas Institucionales de Protección (SIP) con la creación del Banco Cooperativo Español y considera que ahora las cajas “están copiando el modelo”.
EL 'SECRETO' DE LAS RURALES, EL NEGOCIO TRADICIONAL
Además, destacó la fortaleza del modelo de las cajas rurales al no invertir en activos e instrumentos financieros y dedicarse al puro negocio de “captar depósitos de los clientes y conceder créditos a otros clientes”.
También valoró como un éxito que CajaSiete se haya mantenido durante los años de bonanza del negocio de financiar suelo y únicamente haya prestado dinero a los empresarios que eran propietarios, tenían el proyecto pagado y lo que necesitaban era el dinero para levantar la obra. “Eso nos ha salvado”, garantizó.