El exministro Soria se moja en la campaña contra Santamaría llamando a los compromisarios y enviando videos por WhatsApp

El exministro de Industria, Energía y Turismo José Manuel Soria no se esconde para atacar a la aspirante a presidir el PP Soraya Sáenz de Santamaría. Una vez pasado el corte de la primera vuelta, en la que quedaron por el camino amigos suyos como José Manuel García-Margallo, o quien en un principio entendía que podía hacerle cara a Santamaría, Dolores de Cospedal, su campaña a favor de Pablo Casado ha ido a más en Canarias. La animadversión hacia la exvicepresidenta del Gobierno del que fue ministro le ha llevado a tomar parte activa en la carrera para presidir el partido, y lo han notado, entre otras, las personas que forman parte de su agenda. Soria se ha empleado a fondo enviando a algunos de sus contactos de WhatsApp el vídeo atribuido al equipo de Pablo Casado en el que se descalifica la candidatura de Sáenz de Santamaría por la veteranía y el historial de muchos de sus miembros.

Además del envío del vídeo, casi todos los compromisarios del PP de Canarias que acudirán este fin de semana al congreso nacional del partido han recibido una llamada telefónica del que fuera su líder indiscutible durante 17 años (1999-2016) para pedirles expresamente su voto para Pablo Casado. Solo los compromisarios de las islas de Fuerteventura y La Palma se escapan al control de Soria. Uno de los receptores de esa llamada ha manifestado a este periódico no haberse sorprendido por la llamada porque llegó tras la recepción del vídeo en su WhatsApp.

Dos personas que han recibido ese mensaje con enlace al vídeo publicado en eldiario.es lo han reenviado a este periódico para mostrar la hostilidad con la que Soria se está conduciendo en esta campaña, hostilidad que le ha llevado a abandonar su retiro de la política para ocuparse personalmente de hacer campaña contra la persona a la que en gran medida él atribuye su aparición en los papeles de Panamá. Fue el descubrimiento de que mantenía negocios y empresas en paraísos fiscales lo que le condujo a dimitir como ministro y como presidente del PP de Canarias en abril de 2016, pasando desde entonces a ocuparse tan solo de sus negocios privados a través de una consultoría internacional para empresas que estableció en su domicilio particular de Las Palmas de Gran Canaria.

José Manuel Soria forma parte del llamado G-8, el grupo de ministros y ministras de Mariano Rajoy críticos con la que fuera su vicepresidenta, hoy candidata a presidir el PP. Precisamente este jueves se reunían todos ellos en Madrid en un almuerzo de confraternización y de muestra de fuerza que ha supuesto el reencuentro de Soria tras la dimisión de Mariano Rajoy en los foros políticos de Madrid, con los que solo había mantenido hasta ahora discretos contactos.

En la reciente boda de la hija de un importante empresario de Canarias, José Manuel Soria compartió mesa con el presidente regional del PP, Asier Antona, al que el exministro apadrinó para que lo sustituyera tras su dimisión. En ese encuentro quedó patente que la fraternidad entre ambos ha quedado rota por las preferencias de cada uno de ellos en este congreso nacional del partido. Aunque ha manifestado públicamente su neutralidad, Antona apoya a Sáenz de Santamaría, y Soria quiso dejar patente su desagrado no dirigiéndole la palabra en toda la velada y dando por seguro que el ganador del cónclave popular será Pablo Casado: “De eso no tengan ninguno de los presentes la más mínima duda”, proclamó. Antona no abrió la boca.