La consejera de Hacienda del Gobierno de Canarias, Rosa Dávila, ha garantizado este miércoles que el aviso que ha recibido del Ministerio de Hacienda por excederse del techo de gasto en 2016 no tendrá repercusión en el presupuesto de 2017, de manera no habrá ningún tipo de recorte.
No solamente no se va a producir recortes en el presupuesto, sino que se va a incrementar, gracias a una ley de crédito extraordinario de 220 millones de euros que se aprobará en julio, en cuanto entren en vigor los Presupuestos Generales del Estado, dijo la consejera en declaraciones a los medios.
Admitió que el Ministerio de Hacienda ha emplazado a la Comunidad Autónoma a informar de los pasos que va a dar hasta fin de año para garantizar el cumplimiento de la regla de gasto, ante el desfase detectado en 2016 y que el Ministerio calcula en 138 millones de euros, según la consejera.
Pero añadió que la regla de gasto, que limita la capacidad de crecimiento del gasto de las administraciones públicas hasta un porcentaje de su Producto Interior Bruto (PIB), se va a cumplir en 2017 sin problemas y sin recurrir a recortes, así que “tranquilidad absoluta”.
Uno de los motivos por los que no habrá problemas es que el presupuesto canario de 2017 se elaboró con una regla de gasto del 1,8% que luego ha sido incrementada hasta el 2,1% en el Consejo de Política Fiscal y Financiera a finales de diciembre pasado.
Otra razón es que el crecimiento del PIB a final de 2017, sobre el que se calcula finalmente el techo de gasto, será más alto que el inicialmente previsto.
Además, la cifra de 138 millones de euros de exceso en el techo de gasto está en discusión, debido a diferencias en la metodología y en la interpretación de la información contable.
Técnicamente es complejo el cálculo de la regla de gasto y ni siquiera el Ministerio tiene una metodología clara, apuntó la consejera.
En cualquier caso, Rosa Dávila recordó que Canarias es la comunidad autónoma más cumplidora en los criterios de estabilidad, por lo que demandó que en un contexto de crecimiento económico se flexibilice su capacidad de gasto, dado el déficit de financiación de sus servicios públicos.
“Quizás tendría sentido el techo de gasto en 2012, con una crisis muy profunda y una caída del PIB”, pero en un contexto de crecimiento económico y de la recaudación es imposible explicar a los ciudadanos que haya más ingresos y que no se puedan gastar en los servicios públicos cuando se cumplen los criterios de déficit y deuda, señaló.
Demandó que se flexibilice la regla de gasto y que se apliquen a cada comunidad autónoma en función del cumplimiento de los criterios de estabilidad, porque no se puede pretender que “si hay superávit no empleemos esos ingresos en los canarios, para que lo puedan aplicar los catalanes”.