El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha pedido una reunión urgente al jefe del Ejecutivo español, Pedro Sánchez, ante una posible crisis migratoria que afecte a las Islas como consecuencia de un cambio de las rutas derivado de la decisión de Italia de cerrar sus puertos.
La portavoz del Ejecutivo canario, Rosa Dávila, ha admitido este lunes en rueda de prensa, tras la reunión del Consejo de Gobierno, que le preocupa que pueda haber un cambio en las rutas de la inmigración, lo que habría que afrontar desde la solidaridad pero también desde “la plena conciencia” de que es un problema que tiene afrontar la Unión Europea y España.
Después de que este lunes llegase a Canarias un cayuco con 152 personas, 31 de ellos posiblemente menores, Clavijo ha hablado por teléfono con el ministro del Interior, Fernando Grande-Malaska, para saber si han cambiado las dinámicas de las migraciones.
En la conversación, el presidente canario le ha expresado al ministro su preocupación por el cayuco que llegó este lunes a Canarias y le ha reclamado más información para así saber si se puede reactivar la ruta migratoria que pasa por Canarias.
La decisión del Gobierno italiano de cerrar sus puestos puede hacer que las rutas del Atlántico Norte se puedan reabrir, ha alertado la portavoz gubernamental, quien se ha referido a las mafias que mueven a las personas en situación de desesperación derivadas de las hambrunas, pobreza, cambio climático y guerras.
Para la portavoz, la mayoría de las personas que emigran en estas circunstancias lo hacen a través de mafias y especialmente en verano, cuando las circunstancias meteorológicas son más favorables.
Por todo ello, tras hablar con el ministro del Interior, Clavijo ha solicitado una reunión urgente a Sánchez para tratar en concreto la situación de la inmigración “ilegal”, puesto que Canarias quiere estar preparada para recibir con todas las garantías a los inmigrantes.
Dávila ha recordado que Canarias recibió en 2006 más de 40.000 inmigrantes, 8.000 de ellos menores que quedaron bajo la tutela del Gobierno, datos que obligan a las Islas a estar preparadas para poder afrontar un posible rebrote de pateras y cayucos ante las decisiones tomadas por los gobiernos de Italia y Alemania.
“Canarias tiene la experiencia de haber sido una comunidad autónoma que acogió en situaciones muy precarias la llegada de más de 40.000 personas”, ha destacado Dávila, quien ha afirmado que gracias “a Dios” y a “esa experiencia” funcionó el operativo puesto este lunes en marcha para recibir un cayuco con 152 personas.
Según Dávila, se trata de un problema global que debe afrontar el conjunto de España y también la Unión Europea y no de un conflicto que se pueda acotar a un solo país o a una sola comunidad autónoma.