El Consejo de Gobierno ha aprobado este lunes el proyecto de Decreto del Plan de Salud de Canarias 2016-2017, tras finalizar el trámite parlamentario y obtener el respaldo unánime de todas las fuerzas políticas representadas en el Parlamento regional
La entrada en vigor del nuevo Plan de Salud será efectiva en los próximos días, con la publicación del Decreto en el BOC, momento a partir del que se convertirá en el segunda estrategia de salud de la Comunidad Autónoma aprobada desde las transferencias de las competencias sanitarias por el Estado en 1994, ha informado la portavoz del Gobierno de Canarias, Rosa Dávila.
A lo largo de este año se han ido aplicando varias de las medidas contempladas en el Plan, con el objetivo de reactivar la participación e implicación de los agentes sanitarios y sociales.
Para la elaboración del Plan se ha contado con la participación de personal del Servicio Canario de la Salud (SCS) y de otras administraciones públicas e instituciones, como ayuntamientos, cabildos y universidades canarias, a través de diferentes facultades del ámbito sanitario; colegios profesionales, sindicatos, entre otras, ha destacado Dávila.
A estas aportaciones se añaden las realizadas por los ciudadanos participantes en los foros de formación y de debate y por los grupos parlamentarios, a través de la Comisión de Sanidad.
La Ley de Ordenación Sanitaria de Canarias define al Plan de Salud de Canarias como el instrumento estratégico para la planificación y la articulación funcional de las actividades de promoción y protección de la salud; de prevención de la enfermedad y de asistencia sanitaria de todos los sujetos públicos y privados integrantes del Sistema Canario de Salud y garantizar que las funciones del sistema se desarrollen de manera ordenada, eficiente y eficaz.
El Plan de Salud 2016-2017 se basa en los valores y principios de universalidad, equidad y solidaridad, que han de ser desarrollados con transparencia, responsabilidad, eficiencia, calidad y seguridad, garantizando la participación de los profesionales y la ciudadanía y la respuesta a las necesidades de los ciudadanos.
Esta planificación se ha concebido como el instrumento necesario y eficaz para reactivar los sistemas de trabajo que llevan prácticamente en desuso desde el agotamiento del anterior plan y que tienen un impacto decisivo en la toma de decisiones, además de ayudar a sentar las bases del futuro plan que tendrá una duración de no menos de cinco años.
Entre sus objetivos está abordar el envejecimiento de la población y la cronicidad de las patologías que conlleva la necesidad de colaboración socio-sanitaria.
Asimismo, promocionar la calidad y la eficiencia y la participación de los profesionales mediante modelos eficientes de organización y fomentar y potenciar el trabajo intersectorial.
También se pretende influir sobre los determinantes de la salud a través del trabajo intersectorial e incorporar las nuevas tecnologías a la gestión del sistema.
Otro de los objetivos del Plan es la evaluación de los resultados en los procesos que a través del mismo se implementen, así como de los resultados en salud, para sentar las bases del próximo Plan de Salud para el que contar con una experiencia planificadora normalizada.