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El Gobierno ignora a Soria y subirá los impuestos

El Gobierno de Canarias ha asegurado que, en uno de los próximos consejos de Gobierno, se le dará el “visto bueno” al anteproyecto de ley sobre la subida del Impuesto General Indirecto Canario (Igic) para el tabaco rubio en Canarias, para que siga el procedimiento y entre en el Parlamento canario para ser aprobado como ley, a pesar de que el vicepresidente del Gobierno regional, José Manuel Soria, manifestó recientemente que no es partidario de aprobar dicha subida ahora.

El portavoz del Ejecutivo regional, Martín Marrero, recordó que en el Consejo de Gobierno del pasado 11 de febrero se aprobó la subida del impuesto sobre el tabaco rubio después de que el propio Soria presentase la lista de evaluación sobre el anteproyecto de ley de este impuesto especial. El presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, calculó que dicha subida se haría efectiva en el próximo mes de enero.

Con esta decisión, el Gobierno ignora la recomendación de su vicepresidente después de que éste asegurase que no es partidario de poner en marcha una “economía de impuesto”. El portavoz del Gobierno recordó las palabras de Soria y matizó que, en cualquier caso, el vicepresidente habiá afirmado que aceptaría la decisión que adoptase el Gobierno sobre este impuesto.

Marrero señaló que las declaraciones de Soria correspondían a una “opinión personal”, por lo tanto, “no existe contradicción”, asevera.

Plan de ajuste

El portavoz del Gobierno canario, Martín Marrero, ha asegurado que la postura del Ejecutivo autonómico de cara a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado será la de intentar que Canarias tenga “el mejor trato posible”. Según Marrero, para la consecución de dicho objetivo “hay dos vías”, una es a través de la tramitación de los Presupuestos, tanto en el Congreso como en el Senado, y la otra es la negociación entre los gobiernos de Canarias y del Estado.

En esta línea, el portavoz recordó las palabras del presidente autonómico, Paulino Rivero, en las que señalaba que “confío en que las buenas relaciones de lealtad y respeto institucional entre los dos gobiernos se traduzcan en un trato presupuestario razonable”.

Marrero apuntó que hasta ahora ese diálogo entre gobiernos “es fluido y ha reportado pingües beneficios” a Canarias. Asimismo, explicó que “cosa distinta son las negociaciones que realicen los partidos con representación en el Congreso de los Diputados, que ahí cada partido adoptará su estrategia”.

El portavoz insistió en que la reunión del próximo sábado, en la que el Gobierno de Canarias abordará los términos del Plan de Ajuste, “no es la primera, ni será la última”. Para Marrero, este tipo de reuniones no son novedosas porque “no está ocurriendo nada que sea distinto a lo que ocurrió el año pasado y el anterior, ya que desde el año 2008 se están produciendo ajustes presupuestarios en la administración autonómica”.

La última semana de septiembre se aprobaran las directrices sobre las que cada Consejería elaborará su propuesta “concreta y detallada” de los presupuestos, de tal manera que “a finales de octubre se puedan remitir al Parlamento de Canarias”, declaró Marrero y concluyó que “el ajuste estará en torno al 14 o el 15 por ciento y esto complica el ajuste, ya que hay que tener en cuenta que el 85 por ciento de los presupuestos autonómicos corresponden a gastos que no se pueden tocar porque son de mantenimiento de servicios públicos esenciales ?Sanidad, Educación y Servicios Sociales-”.