El alcalde de San Sebastián de La Gomera, Manuel Herrera, (CC), dijo este miércoles que el portavoz del grupo Socialista, Ángel Luis Castilla, habla de caos en la corporación, y añadió que eso fue “lo que él dejó” cuando fue alcalde del municpio.
Manuel Herrera destacó que la “desastrosa situación heredada” ha sido uno de los motivos del retraso en la aprobación de los presupuestos del Ayuntamiento de la capital gomera.
En un comunicado, Herrera señala que durante todos los años Castilla como alcalde se creó “una maraña muy difícil de desentramar”, que, entre otras acciones, llevó a realizar una auditoria que ha resuelto un déficit “en cobros de más de un millón de euros.
“También heredamos un Plan General aprobado pero paralizado, fruto del enfrentamiento entre Ángel Luis Castilla y Casimiro Curbelo, sobre todo, por los intereses de este último en cuanto a la edificabilidad de los terrenos en la zona del Lamero ”, afirma el alcalde, de Coalición Canaria.
Precisa que “Ángel Luis Castilla defendía los intereses de los inversores, mientras que Curbelo utilizaba la institución que preside como herramienta de presión para sus intereses personales y de sus empresas Chewing West y Argamul SL, con las que ha efectuado operaciones en varias zonas del municipio”.
Reitera Herrera que la moción de censura responde a intereses urbanísticos de Castilla y Curbelo, “el problema ha sido que no nos hemos doblegado a los intereses económicos de nadie y hemos sido respetuosos con el Plan General”, dice, y subraya que Castilla “me hacía ofertas para gobernar con algunos de sus concejales cada dos por tres”.
Castilla, según Manuel Herrera, “debe explicar si se ha beneficiado como alcalde para la construcción de su casa en suelo rústico o para la adquisición de un terreno con el que después se realizaron permutas en suelo urbano, unos asuntos que, tal y como informó ayer el teniente de alcalde, Domingo Curbelo, se trasladarán a la Fiscalía Anticorrupción”, indica.
El alcalde se muestra satisfecho con el trabajo realizado por el grupo de gobierno durante este año, en el que “se nos ha puesto todo tipo de zancadillas”.
Lamenta que con la posible llegada de Castilla a la Alcaldía vuelva “el caciquismo puro y duro, el miedo a opinar y se pierda el espacio ganado de libertad”.
“Hemos sido incómodos y no hemos sido sumisos al dictado del Cabildo”, afirma Herrera, quien resalta que “hemos luchado por el municipalismo y eso no ha gustado”.
Considera Herrera que “el Cabildo debe ser el Cabildo insular y no el séptimo ayuntamiento de la isla”, deja claro que muchos ciudadanos tienen la sensación que se les ha robado el voto, y recalca que el PSOE “está denigrando la democracia al saltarse el pacto antitransfuguismo”.
“Pedro Padrón ha sido una persona trabajadora y no entiendo los motivos que le han llevado a esta situación; respeto su decisión pero no la comparto, pues para mí lo ético en el caso de desavenencias es dejar el acta de concejal”, comenta.
Manuel Herrera concluye que una de las declaraciones que más le ha dolido de Castilla ha sido “intentar desprestigiarme con calumnias y decir que ando en los bares bebiendo, lo que evidencia que hace de todo por buscar el poder”.