La Policía no ha retirado el servicio de protección al exministro José Manuel Soria, dos años después de dimitir por el escándalo de sus empresas en paraísos fiscales. A pesar de que en julio pasado desde el Ministerio del Interior negaban la mayor, al revelar Canarias Ahora que Soria disponía de escolta y vigilancia de su domicilio quince meses después de su dimisión, este periódico ha podido comprobar esta última semana que la Policía lo acompaña en sus viajes de negocios y de placer. Y que él elige los momentos en que considera que debe estar acompañado por agentes del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la Brigada de Seguridad Ciudadana.
El exministro de Industria, Energía y Turismo, desde hace más de un año dedicado al asesoramiento con su empresa Sorben Partners, tanto al sector turístico como a la industria del automóvil, viajó el lunes 9 de abril de Gran Canaria a Madrid. Un coche camuflado, con dos policías, conductor y escolta, lo recogió en su chalet de Tafira para su traslado al aeropuerto de Gando. El vuelo lo hizo con el escolta a bordo, que de inmediato regresó a la isla, tras dejar al exministro en manos de otros dos compañeros adscritos a la Jefatura Superior de Policía de Madrid, también con coche camuflado.
El expresidente del PP de Canarias estuvo hasta este jueves en la capital, donde el lunes participó con el exministro Luis de Guindos y el gobernador del Banco de España, Luis Linde, en una comida privada en la sede de la empresa pública Cesce, organizada por su grupo de compañeros adscritos al Cuerpo Superior de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, del que forman parte, informó InfoLibre.
A su regreso de Madrid a Gran Canaria en el vuelo de Iberia 3838, un vehículo oficial camuflado –coche k, en el argot- con dos policías lo esperaba este jueves en la terminal de llegadas del aeropuerto de Gando, como pudieron presenciar dos reporteros de este periódico. El coche k quedó aparcado con el conductor en en la zona reservada a autoridades mientras el otro agente entraba en la sala de recogida de equipajes para custodiar a Soria hasta el coche.
Es el exministro el que, a través de un colaborador de su consultora, comunica a las autoridades policiales su plan de viaje cada vez que desea contar con esta cobertura oficial, que incluye traslado desde su casa, acompañamiento en el avión, recogida en el aeropuerto de destino y traslados con escolta durante su estancia fuera de Gran Canaria. Estando en la isla, sin embargo, no está permanentemente escoltado por agentes policiales, aunque constan algunas visitas a clientes de Sorben Partners en los que ha reclamado el servicio.
Este periódico ha vuelto a dirigirse, sin respuesta, tanto a la Jefatura Superior de Policía de Canarias como al Ministerio del Interior para conocer por qué se le mantiene escolta de alto cargo o persona bajo una amenaza real a José Manuel Soria, cuando desde el cese del terrorismo etarra la norma de continuar con la protección de los ministros los dos años siguientes a dejar el cargo fue sustituida por la Instrucción 3/2012 de la Secretaría de Estado de Seguridad.
Esta instrucción interna del Ministerio del Interior regula el servicio de protección y escolta bajo criterios de optimización de recursos y evaluación de los grados de amenazas reales de cada caso. Cada seis meses, como mínimo, se deben analizar las circunstancias personales y las causas de riesgo que motivaron la protección de la persona, y es la denominada Comisión Ejecutiva de Coordinación (CECO) de esa secretaría de Estado la que en última instancia decide si mantener o no el servicio.
Solo cuando Canarias Ahora descubrió en julio pasado que al menos ocho policías y dos coches protegían día y noche a José Manuel Soria, tres meses después de que Madrid decidiera bajo esos criterios de la Instrucción 3/2012 retirar el servicio –al cumplirse un año de su dimisión-, el Ministerio del Interior comenzó a filtrar explicaciones extraoficiales de que el domicilio de los Soria estaba bajo vigilancia debido al misterioso robo en su vivienda la Nochebuena de 2016. Aún sin resolver.
Durante todo este tiempo, la Delegación del Gobierno en Canarias –la responsable de mantener la escolta en las Islas a Soria contra el criterio inicial de abril pasado de la Secretaría de Estado, según fuentes policiales- fue retirando discretamente la vigilancia estática del domicilio de los Soria en Tafira Alta, que hasta entonces había costado al erario público más de 250.000 euros durante quince meses, entre la protección dinámica y el estacionamiento fijo en su calle.
“Gasolina y parking gratis”
De mantener activos tres coches k y seis policías en tres turnos las 24 horas del día apostados delante de su casa, bajo la excusa del robo no resuelto de Nochebuena, la Policía Nacional ha pasado a patrullar cada dos o tres horas por el barrio de los Soria, con pasadas por delante de su casa, pero dentro de un servicio de Seguridad Ciudadana que abarca más cometidos diarios en la capital grancanaria, explican a este periódico fuentes policiales conocedoras de los protocolos habituales.
Sin embargo, lo que se mantiene inalterable es la escolta dinámica cada vez que el exministro la requiere. “Tiene gasolina y parking gratis para sus desplazamientos sociales y personales”, denuncian las fuentes consultadas cuando detallan todos los movimientos del asesor de empresas José Manuel Soria a costa de los Presupuestos Generales del Estado. El último de ellos conocido, para el que se desplazó también a Madrid, fue su presencia en el Encuentro de Directivos de Domingo Alonso SA.
El 15 de marzo pasado, una alta directiva de esta concesionaria de automóviles de las Islas, colgaba en su cuenta de instagram una foto en la que aparecían cargos de la empresa de la familia Alonso Rohner y un vicepresidente de Volkswagen internacional junto a José Manuel Soria. Todos ellos, menos el vicepresidente internacional de ventas de la marca de coches referente de Domingo Alonso, iban ataviados con camisetas con el lema fail! (fallo, en inglés), motivo del encuentro de directivos de la mercantil.
Para ese viaje a Madrid, José Manuel Soria también requirió los servicios de escoltas del Cuerpo Nacional de Policía. El exministro contó con coche, chófer y escoltas desde el martes 13 de marzo hasta el sábado 17, día en el que regresó a Gran Canaria.
Por el historial de servicios que requiere José Manuel Soria, parece tener debilidad por acudir con coche policial y escoltas cada vez que acude a una reunión de trabajo en la sede de Domingo Alonso, S.A. de Las Palmas de Gran Canaria. Una exigencia que no extiende a muchos más desplazamientos en la ciudad en la que vive.
En estos casos, el protocolo activado directamente con la Brigada de Seguridad Ciudadana no requiere de tantos requisitos previos como en los viajes de avión, para los que el asistente personal de Soria ahora en Sorben Partners y desde los tiempos en que era alcalde de Las Palmas de Gran Canaria hace ya más de quince años, lo comunica con tiempo suficiente para preparar el desplazamiento. Según explican las fuentes consultadas, no siempre viaja el escolta a Madrid con Soria. Es a criterio del exministro –si prefiere darle más o menos relevancia pública a ese viaje particular- cuando el policía embarca. Eso sí, al aeropuerto lo llevan siempre.
El despliegue de Lanzarote
En todo este periodo de protección policial para asuntos privados y personales, el de su viaje de vacaciones a Lanzarote en agosto pasado se lleva la palma. Al menos, entre los que hayan trascendido a la opinión pública. José Manuel Soria y su esposa se trasladaron en su coche y en barcos de Gran Canaria a Lanzarote, a través de toda Fuerteventura, escoltados en todo momento detrás por vehículos k puestos a su disposición por las comisarias de las respectivas islas por las que transitó.
El despliegue, captado también por Canarias Ahora en su versión de vuelta a casa, requirió de dos policías en Gran Canaria para trasladar al escolta hasta el Puerto de La Luz y de Las Palmas. Ahí Soria y su esposa embarcaron con su coche particular y el escolta subió a bordo como pasajero sin vehículo. Al desembarcar en el muelle de Morro Jable, en el sur de Fuerteventura, otro coche k adscrito a la comisaría de la capital majorera, Puerto del Rosario, recogió al guardaespaldas para trasladarlo atravesando toda la isla hasta Corralejo, en el extremo norte.
En el muelle de Corralejo se repitió la operación de embarque: Soria y esposa lo hicieron en su vehículo y el escolta, por las escalerillas del ferry que une el norte de Fuerteventura con el sur de Lanzarote, en Playa Blanca. Unos 25 minutos después, ya Soria y esposa se trasladaron al hotel Volcán, su habitual lugar de vacaciones en Lanzarote, propiedad de la misma firma del hotel de Punta Cana en el que veraneó invitado siendo ministro. Al escolta, por su parte, lo esperó otro coche oficial adscrito a la comisaría de la capital conejera, Arrecife, para su traslado al aeropuerto y regreso en avión a Gran Canaria.
El operativo vacacional de Soria y su mujer, la procuradora Mari Carmen Benítez, no contó, sin embargo, con la vigilancia estática que hubiese requerido siendo ministro, porque el municipio de Yaiza, donde se ubica el hotel Volcán es competencia de la Guardia Civil. Todo un síntoma de que la protección policial a Soria no es una cuestión de Estado ni responde a motivos de riesgos reales, analizadas en teoría desde la Secretaría de Estado de Seguridad por esa Comisión Ejecutiva de Coordinación que da los vistos buenos a las escoltas, tanto de la Policía como de la Guardia Civil.
En todo caso, y es lo que apuntan fuentes policiales, todo responde a un capricho consentido desde la Subdelegación del Gobierno o por sus amagos de tirar de la manta –llegó a especularse con que estaba escribiendo una especie de memorias y que tenía grabados a grandes empresarios en su despacho de ministro; de ahí una de las teorías del misterioso robo en su casa- por lo que se le mantiene un status perdido desde que truncó su carrera política al aparecer en los papeles de Panamá.
Lo cierto es que cuando este 15 de abril se cumplen dos años de su dimisión al descubrirse que mantenía sociedades opacas en el paraíso fiscal de Jersey desde que era alcalde de Las Palmas de Gran Canaria –y hasta el mismo día de su cese como ministro- a Soria la Policía le acompaña a donde él quiera.