El alcalde de Firgas, Manuel Báez (CC), ha sido absuelto del delito de prevaricación que se le imputaba por cambiar el nombre de una calle en 2010, tras haber retirado el Ministerio Fiscal su acusación en el transcurso del juicio que se ha celebrado este jueves en Las Palmas de Gran Canaria.
La vista se ha celebrado en el Juzgado de lo Penal número 6 y se ha saldado con la libre absolución de Báez, una vez que la acusación pública ha renunciado a seguir adelante los cargos por los que pedía que fuera inhabilitado durante diez años (cambiar el nombre de una calle sin contar con la necesaria aprobación del pleno).
El fiscal Luis Estévez retiró su acusación tras escuchar la declaración del testigo principal: el operario del Consistorio que había realizado el cambio del nombre de la vía y que hoy ha reconocido ante la jueza que Báez le había ordenado preparar la placa, pero que a lo mejor fue un “malentendido” suyo el colocarla.
En líneas similares, han declarado los vecinos ante la titular del Juzgado de lo Penal número 6 de Las Palmas de Gran Canaria, Eva Armesto, quienes han admitido haber presentado al menos tres solicitudes firmadas en el Consistorio con el objetivo de que se recuperase el nombre originario de la calle Montaña de Firgas, que en esos momentos se llamaba calle Maestro Claudio Castilla Gamero.
El actual regidor de Firgas ha manifestado que él sólo había ordenado que se preparase la placa con el nombre de la calle de Montaña de Firgas, ya que se iba a llevar a pleno una moción por la vía de urgencia en febrero para aprobar el cambio, y ya se sabía que la iniciativa iba a contar con el voto favorable de ocho ediles del grupo de gobierno.
Es más, ha recordado que ese cambio de denominación de la vía se aprobó por urgencia en el pleno de febrero de ese año.
Por su parte, el denunciante, el exedil Segundo Vega, ha declarado que, a pesar de ser el responsable del área, el alcalde había ordenado el cambio cuando él se encontraba fuera de la isla y a “sus espaldas”.
Vega ha reconocido también que ante la magistrada que tenía interés en que se condenara a Báez, puesto que como consecuencia del no entendimiento entre ambos -dice- ha tenido que “caminar por los senderos de la Justicia” para resolver varias cuestiones.
Tras las declaraciones de varios de los testigos citados, y ante la falta de pruebas de que el actual alcalde hubiese cometido un presunto delito de prevaricación, el fiscal ha decidido retirar la acusación, por lo que la jueza ha absuelto a Manuel Báez.