El aspirante a la Secretaría General del PSOE, Eduardo Madina, ha afirmado este miércoles que al ministro de Industria, José Manuel Soria, “no le interesa” Canarias, e incluso, ha dicho que “no manda nada” en el Gobierno salvo “para sus cuatro amigos de fuera”. Madina se ha posicionado así en el debate social abierto sobre las prospecciones petrolíferas en aguas cercanas a las islas, y ha insistido en que los canarios “no merecen” a un ministro como Soria que proporciona un “ataque directo” al modo de vida de los ciudadanos.
Presentado por la diputada nacional Patricia Hernández, ha intervenido en un acto ante más de un centenar de afiliados y simpatizantes que ha contado con la presencia, entre otros, del vicesecretario del PSOE canario, Francisco Hernández Spínola, y el secretario general de UGT, Gustavo Santana.
En el coloquio, ha dicho que el PSOE debe “escuchar” a los movimientos sociales para volver a conectar con la sociedad, y ha afirmado que en el futuro diseño del partido, el criterio territorial no debe ser “prioritario” frente al de cualificación. “No será sencillo pero hay que intentarlo”, ha explicado.
Sobre la monarquía, se ha declarado “republicano, de izquierdas y socialista, sin complejos”, aunque ha aclarado que el PSOE es un partido “productor” de la convivencia.
Ha dicho que para las próximas Elecciones Generales hay que recuperar la Ley de Dependencia que “ha arrasado” el PP buscando la mejor manera para financiarla, y ha rechazado los “eslóganes baratos” sobre el artículo 135 y el límite de déficit, abogando por la reforma de la Ley de Estabilidad.
Además, ha apuntado que en caso de ganar, fomentará “alianzas” con partidos laboristas, socialistas y socialdemócratas para impulsar un “cambio” en las instituciones europeas, empezando por el “sacrosanto” Banco Central Europeo.
Acabar con los “conflictos internos”
Asimismo, ha dicho que hay que acabar con los “conflictos internos” y olvidarse de “ganar congresos” y no elecciones, y ha mostrado “serias dudas” con la implantación de listas abiertas, especialmente para los ayuntamientos pequeños y los lugares de costa por los problemas que plantea la financiación de las campañas.
En esa línea, ha pedido una “etapa nueva” para todos los partidos, no solo el PSOE, con listas cremallera y primarias, y aunque ha dicho que los avales son “un lío”, cree que debe haber unos mínimos para poder presentarse a las candidaturas.
Sobre los pactos, ha pronosticado que el próximo mapa municipal será muy diverso, con entrada de nuevas formaciones políticas, por lo que ha solicitado interpretar el diálogo “de manera más abierta” y así garantizar la gobernabilidad de las instituciones.