El grupo de gobierno del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz, liderado por el alcalde Marcos Brito, ha negado a los trabajadores del consistorio la posibilidad de organizar una asamblea. El objetivo de la misma, solicitada de forma oral y por escrito por los representantes de los trabajadores, era informar a los trabajadores municipales de las medidas extraordinarias aprobadas en Pleno celebrado el pasado día 29 de diciembre de 2010.
Sin embargo, pese a que tanto el Comité de Empresa y como la Junta de Personal pidieron permiso al grupo de gobierno municipal, integrado por CC y PP, para celebrar la asamblea, éstos se han negado. En la asamblea también se pretendía decidir el calendario de protestas.
En un comunicado, tanto Intersindical Canaria como CSIF explican que “la respuesta contundente del Gobierno ha sido la denegación a la solicitud conjunta para celebración de asamblea de trabajadores”.
No obstante, los representantes sindicales han decidido no amedrentarse por la negativa e informan que el próximo viernes “se celebrará asamblea, guste o no al grupo de gobierno”. En ese sentido, advierten que si continúan con los impedimentos, “la asamblea será celebrada bien en la Plaza de Europa o en la zona del Penitente”.
El pasado 29 de diciembre, el consistorio aprobó en su Pleno, varias medidas económicas y recortes de derechos a los trabajadores. Entre éstos están la suspensión de las pagas extraordinarias de marzo y septiembre, pluses de toxicidad, penosidad, transporte, quebranto de moneda y reproducción de documentos; y suspensión de todos los complementos de productividad, premios de constancia y de 25 años de servicios prestados que se devenguen en 2011.