La nueva consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Brigida Mendoza, ha comenzado su andadura al frente del área reconociendo que no son tiempos fáciles, pero apostando por el optimismo como fórmula para afrontar las demandas sanitarias de los canarios.
Mendoza, que ha comenzado agradeciendo la confianza depositada por el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, para este nuevo cargo no ha dejado de reconocer que estos no son “tiempos fáciles”.
“Evidentemente, no son tiempos agradables, pero creo que hay que darle optimismo, hay que pensar en los canarios, llegar a todos y yo creo que seremos capaces de mantener el nivel de calidad y llegar a la máxima eficiencia”, ha subrayado la nueva consejera.
Asimismo, ha expuesto un mensaje conciliador tanto con los médicos como con los pacientes. Sobre los primeros, ha reconocido que hacen una labor “impresionante”. “Son momentos difíciles pero ellos están a la altura y seguirán estándolo, voy a dejar mi trabajo y todo lo que pueda en esta nueva tarea”, ha recalcado.
“Quiero garantizar la calidad del servicio y que se den respuesta a los temas de salud, como las listas de espera”, ha concluido la que hasta ahora ha sido gerente del Hospital Universitario Insular Materno Infantil de Gran Canaria.
Trayectoria
Brígida Mendoza había desarrollado ya labores de responsabilidad como subdirectora del Complejo Insular Materno-Infantil y fue técnico en la Dirección General de Programas Asistenciales de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias. Es licenciada en Medicina y Cirugía por la Universidad de La Laguna, diplomada en Medicina de Urgencias por la Université de Bordeaux II, y Capacitación en Medicina de Catástrofes por la misma universidad.