Oramas (CC) dice que España no necesita a gente “con gafas negras” como Rajoy, ni un presidente con “buenismo”

La diputada admite que los PGE no les gustaban pero votaron a cambio de 1.400 millones para un plan de Empleo en el Archipiélago

SANTA CRUZ DE TENERIFE, 17 (EUROPA PRESS)

La diputada por Coalición Canaria en el Congreso, Ana Oramas, dijo hoy en un congreso insular de su partido, celebrado en Tenerife, que la gente, en un momento como el actual, tiene que ver que “podemos luchar” y que este país no necesita en el Gobierno a una persona como el popular Mariano Rajoy que lo ve todo “con gafas negras”, pero tampoco a un presidente (el socialita José Luis Rodríguez Zapatero) que “no tiene lo que hay que tener” porque la gente no quiere “buenismo”.

Oramas --que en su discurso tuvo palabras para los fundadores del partido como Manuel Hermoso, Adán Martín o Miguel Zerolo-- dijo ante los militantes y miembros de la formación política que en un momento como este la gente lo que necesitas es “autoridad”. En este sentido recordó que los ministros más valorados son el de Fomento, José Blanco, “porque puso a los controladores aéreos en su sitio”; la vicepresidenta, Teresa Fernández de la Vega, y el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, por su lucha contra ETA. “La gente no quiere buenismo”, aseveró la nacionalista con el aplauso de los presentes.

Recordó que su partido, en Madrid, apoyó los Presupuestos Generales del Estado. “No nos gustaban, pero aportaban 1.400 millones de euros para un Plan de Empleo para Canarias” recordó la exalcaldesa de La Laguna que consideró que todas aquellas medidas o compensaciones que sean buenas para las islas van a ser impulsadas por su grupo.

EL PLÁTANO

Otro de los temas que puso sobre la mesa, la vicepresidente de CC es la situación del Plátano canario. Explicó a los presentes que algo pasa cuando los líderes en Madrid vienen a visitar las fincas de plátano. Advirtió este gesto como una señal de campaña electoral. Criticó a los socialistas canarios que habían hablado de “mamandurria” en cuanto a la gestión y la situación de las 10.000 familias que viven de la producción de la fruta.