Como si de un edificio afectado de aluminosis se tratara, nacionalistas y socialistas han decidido apuntalar “pase lo que pase” al Gobierno de Canarias y a su presidente, Paulino Rivero.
No importa que CC haya perdido el Cabildo de El Hierro, esté a punto de quedarse sin el de La Palma y ya no tenga un alcalde en Tacoronte. Tampoco derrumbará al Ejecutivo del Pacto que los socialistas hayan sido descabalgados de las alcaldías de San Juan de La Rambla y Güímar o que puedan ceder el bastón de mando de Santa Cruz de La Palma a un edil conservador.
El PP es el verdadero adversario, el partido que hay que combatir y al que no se le puede dar la satisfacción de entrar en el Ejecutivo regional.
Así lo han asegurado, al alimón, el máximo dirigente de los nacionalistas, José Miguel Barragán, y el secretario de Organización del PSC, Julio Cruz, al término de la reunión excepcional y urgente de la Mesa de Seguimiento del Pacto para analizar la moción de censura que socialistas y conservadores han presentado contra Guadalupe González Taño.
“Pase lo que pase no se va a desestabilizar el Gobierno de Canarias. Si alguien creía que así se va a romper el acuerdo regional, ha pinchado en hueso”, ha asegurado Barragán en las escaleras de entrada al Parlamento al acabar la reunión.
“Tenemos una agresión muy gorda en estos momentos, pero no vamos a caer en la estrategia del PP de enredar con el fin de desestabilizar y romper el Gobierno”, ha rematado Cruz.
Y tampoco CC va a pedir compensaciones a sus socios, aunque Barragán ha reconocido que tras todos estos acontecimientos “es verdad que existe pérdida de confianza, pero estamos empeñados en recomponerla”.
Hasta 2015
¿Y cuántas agresiones de propios y extraños puede aguantar el Pacto sin resquebrajarse? Pues a juicio de lo declarado por ambos dirigentes, puede aguantar de todo.
“Podemos decir a quienes están desestabilizando, incluso dentro del Pacto, que, aunque consigan algún triunfo local, Canarias va a tener al mismo Gobierno y al mismo presidente hasta el final de la legislatura”, ha insistido Barragán.
Un mensaje en clara clave interna, pues tanto en el seno de varias direcciones insulares del PSC y de CC no son pocos los que avalan este tipo de acuerdos con el fin de minar el liderazgo de Paulino Rivero y José Miguel Pérez, ninguno de los cuales estuvo en la reunión.
Un mensaje que ha debido escuchar Antonio Castro, presente en la reunión junto a Taño y Javier González Ortiz, y uno de los principales inductores de haber decidido echar al PSC del equipo de gobierno de Cabildo, lo que ha desembocado en la previsible moción de censura con la que los disidentes a Rivero pretendían conseguir romper el Ejecutivo.
“Hemos tenido una conferencia el fin de semana de la que ha salido un PSOE nuevo, un PSOE que cumple con la palabra dada y cuyo principal enemigo, aquel que más alejado está de lo que defendemos, es el PP, por lo que no avalamos ni un solo acuerdo con el PP”, dijo Cruz.
Por ello, el dirigente socialista ha pedido a “los seis compañeros” que han censurado a González Taño que “reconsideren la situación” no solo por “la necesidad de respetar los acuerdos” sino “por respeto a nosotros mismos como socialistas”.
A final de mes habrá una nueva reunión del Pacto, en la que además de analizar las enmiendas a los Presupuestos y “dar un impulso político a la acción del Gobierno”, los socios se enfrentarán a los hechos consumados en La Palma.