Los grupos del Pacto (CC y PSOE), que hasta ahora han sido acusados por Nueva Canarias (NC) y Podemos de promover un debate “sesgado” y “partidista” en la comisión que aborda la reforma electoral, han asumido varias de las propuestas del documento remitido por la plataforma Demócratas para el Cambio (asumido por la fuerza morada y los nacionalistas de izquierda) con el fin de demostrar que “ni queremos retrasar nada, ni queremos dirigir los trabajos de la comisión”, según ha asegurado el portavoz nacionalista, José Miguel Ruano, tras la reunión de la ponencia celebrada este lunes.
Unos tibios cambios incorporados al marco oficial por el que transcurrirán los trabajos de la oposición y que han sido insuficientes para contar con el apoyo de NC y la fuerza morada, que han votado en contra al defender el que fuera el documento de la plataforma, que sirviera de guión para los debates que comenzarán en septiembre.
De esta manera, los grupos que conforman el Gobierno no se cierran a que se pueda valorar que el sistema proporcional para calcular el número de cargos electorales de cada circunscripción en función de los votos emitidos no sea el vigente sistema D'Hont (dividir el número total de votos que ha recibido cada partido por 1, 2, 3, 4 y 5, y de todos los resultados, los cinco diputados se reparten entre las cinco cifras más altas, independientemente del partido) y que en Canarias se pueda aplicar otro distinto (métodos Sainte-Lagüe, Droop, Hare o Hagebanch-Boschoff), aunque sea distinto al del resto de España.
En lo que sí se han cerrado en banda nacionalistas, socialistas, conservadores y Mixto (ASG) es en promover la posibilidad, como propusieron NC y Podemos, de que el Parlamento esté constituido por dos cámaras (remedando al Congreso y al Senado), pese a que el primero en proponerlo hace décadas fue Victoriano Ríos, dirigente histórico del moderno nacionalismo canario y ex presidente del Parlamento.
“Hace poco más de un año, el que era comisionado para el autogobierno, Fernando Ríos, defendía un esquema bicameral”, aseguró el líder de NC, Román Rodríguez.
“Hemos incorporado todo aquello que suponga sumar, pero nunca restar, pues había propuestas de la plataforma que lo que pretendían era que desistiéramos de lo que habíamos presentado en nuestro documento”, ha asegurado Ruano.
Una explicación no compartida por la diputada de Podemos Concepción Monzón, para quien CC y PSOE “insisten en cercenar el debate no abriendose a la posibilidad de otras opiniones y considerando, por ejemplo que el informe del Consejo Consultivo es jurisprudencia, cuando no lo es”.
Y es que el Pacto insiste en que, por ejemplo, crear una lista regional o modificar el número de diputados (menos de 50 o más de 70) requeriría una reforma estatutaria y no valdría solo con una ley canaria, como sí sostienen NC y Podemos “en base a opiniones de prestigiosos juristas”.
Restricción vs. descripción
“Su documento es partidista y tiene cuestiones interpretables jurídicamente, el nuestro es totalmente aséptico. El suyo es restrictivo y el nuestro es descriptivo”, insistía Rodríguez.
CC y PSOE también aceptado que el Código de de Buenas Prácticas en Materia Electoral aprobado en 2002 por la Comisión Europea para la Democracia por el Derecho sirva como documentación de trabajo para los futuros debates.
Con todo, el portavoz de NC afirma que “vamos a remitir un escrito a la Mesa para que el documento de la plataforma, asumido por nosotros, conste como existente, pues el Pacto quiere invisibilizarlo y que solo exista el que han aprobado con sus votos”.
Una aprobación cuestionada también por Monzón, porque “ha salido adelante gracias al voto ponderado de la fuerza que les da una representación electoral cuestionada y que queremos cambiar”.
Tras la aprobación del marco de referencia, la Comisión de estudio de la reforma electoral se reunirá ya en sesión pública (retransmitida en directo y con presencia de medios de comunicación) en septiembre, aunque aún el presidente de la misma, el nacionalista Antonio Castro, no ha decidido si será el día 5 o el 12.