LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 24 (EUROPA PRESS)
El Grupo Popular de Las Palmas de Gran Canaria criticó hoy que una familia media de la capital grancanaria tendrá que pagar una media de unos 1.300 euros anuales por la subida de impuestos.
Así, lo afirmó el viceportavoz del PP de la capital grancanaria, Felipe Afonso, quien insistió en que el aumento de los impuestos de Las Palmas de Gran Canaria habrá que unirlo al del Gobierno central que rondará los “1.000 euros”, de ahí los 1.300 euros anuales que previsiblemente tendrá que pagar un ciudadano de dicha ciudad.
Afonso también subrayó, en un desayuno del PP, que la subida de tributos que se prevé aprobar mañana en el pleno municipal “es más dura” que la anunciada en junio, ya que el Consistorio prevé recaudar el próximo año alrededor de unos 30 millones de euros. Sin embargo, criticó que exista “un esfuerzo importante de publicidad y propaganda” que “es la especialidad del PSOE”.
En relación al incremento de los impuestos, afirmó que “hay varios a los que se les aplica los tipos máximos” permitidos por la legislación vigente y entre los que citó el de construcción, las plusvalías o el de los edificios del Puerto de la capital grancanaria.
Añadió que “también hay un esfuerzo de maquillaje”, ya que “no se especifica” el cambio de valor de las calles que “afecta a cerca de nueva tributos, eso no se cuantifica” y en los que se realiza “es haciendo trampa, comparando la previsión inicial de este año con la que se estima para el próximo año muy a la baja”.
También, en este sentido, se refirió al callejero de la ciudad sobre el que indicó que el PP ha solicitado que se quiten de la primera categoría calles como Obispo Romo, Juan Rejón o Albareda, además de que en la zona de Siete Palmas “hay Viviendas de Protección Oficial (VPO)” que, a su parecer, tampoco tendrían que estar en primera categoría.
Agregó que los socialistas aumentarán los impuestos en el año “en el que el Ayuntamiento ha manejado más fondos, posiblemente, de su historia”, ya que puntualizó que si al presupuesto del Consistorio capitalino se le suma el dinero del Plan E, “posiblemente el Ayuntamiento nunca en su historia, ha manejado más fondos”.
En este sentido, subrayó que con el Plan E se está haciendo “obra sobre obra” y para los populares “no se ha conseguido el objetivo que era crear empleo, hoy hay más paro en la capital grancanaria que cuando se empezó” dicho Plan.
EL IBI URBANO SUBE UN 28,84%
Afonso hizo un repaso por algunos de los impuestos que el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria incrementará, entre ellos, se refirió al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) urbano, tipo “único para toda la ciudad” que subirá un “28,84 por ciento”, lo que sobre la previsión de ingresos de este año supondría para 2010 “casi 14 millones de euros”.
“Es un impuesto que no contempla la capacidad real de pago del ciudadano en un mismo edificio. El concejal de Hacienda se empeña en demostrar que los ricos viven en un barrio y los pobres viven en otro, y todos en nuestro propio edificio hay gente que llega a final de mes y gente que no llega a final de mes”, apuntilló.
Por ello, al ser un tipo “único” para la ciudad, “todos” los ciudadanos “van a pagar lo mismo por metro cuadrado de vivienda”, ya que el valor catastral “es el mismo”, de ahí que incidiera en que se trata de un impuesto que “no obedece a la capacidad real de pago”. De esta forma, subrayó que “penaliza al que peor lo está pasando”.
Respecto al IBI de características especiales aumentará en el Puerto de La Luz y de Las Palmas un “116,66 por ciento”. Esto supondrá que “muchas” empresas tendrán que pagar una media de “5.000 euros más al año”, lo que implicará “menos competitividad” y por ende “menos empleo”.
En relación con el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), se contemplan cinco categorías cada una con un porcentaje “distinto”, de tal forma que la que más sube es la quinta que lo hace en un “66,6 por ciento”. Respecto al resto de categorías del IAE la primera se incrementa en un “59,47 por ciento, la segunda 20,6 por ciento, la tercera 31,25 por ciento y la cuarta 24,13 por ciento”.
Para Afonso “no tiene ninguna coherencia unos porcentajes con otros” y, a su entender, lo que “hay es un afán recaudador”. De todos modos, indicó que al igual que el IBI de características especiales “castiga la actividad económica, la mayoría de los impuestos de la actividad económica suben al máximo, la penaliza, con lo cual significa menos competitividad, más costes, que al final repercute en el consumidor o en la reducción de otros costes”.
“PENALIZAR LA ACTIVIDAD ECONÓMICA”
En relación con el tributo de los vehículos de tracción mecánica subirá “un 20 por ciento más” con lo que se volverá a “penalizar la actividad económica”.
También se refirió al incremento del Valor de Bienes de la Naturaleza Urbana el aumento lo cifró en un “20 por ciento”, aplicando el tipo “máximo” de la legislación vigente. Este impuesto, dijo, “dificulta” además el movimiento “normal” de la edificación tanto de particulares como empresas.
Respecto, al impuesto de construcciones y obras también se le aplicará el tipo “máximo legal”, con una subida del “21,21 por ciento”.
En cuanto a los tributos relacionados con los vados, cargas y descargas en la vía pública subirá una media “superior al 66 por ciento”; mientras que el impuesto sobre el vertedero municipal el incremento lo cifró en un “63,22 por ciento”. Añadió, en relación con esto último, que “a más presión fiscal, más escombros en los barrancos”.
Afonso sobre los impuestos de móviles indicó que “se va a pasar a las compañías algo más de un millón y medio de euros”. En este sentido, se refirió a un estudio sobre lo que gastan los ciudadanos en móviles y apuntó que en Las Palmas de Gran Canaria una persona tiene un coste de media en móvil de “337,85 euros al año, lo que se gasta un concejal del PSOE en 15 días”.
Finalmente, se refirió a la empresa municipal pública de agua, Emalsa, sobre la que criticó que “depura mal, llena de boro y olores, se autoadjudicado el saneamiento y Saavedra --alcalde de Las Palmas de Gran Canaria-- lo premia con 2 millones de euros más”, ya que el tributo de agua facturada incrementará “algo más de un 35 por ciento en el recibo”.