El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, ha rechazado este martes que el Estado pueda ejercer una labor de fiscalización previa a la aprobación de los presupuestos de las respectivas comunidades autónomas, asegurando que ello, incluso, “atenta contra la Constitución”.
“Tenemos que tener nuestra autonomía y actuar con responsabilidad. Especificar criterios de control y de penalización pero no una fiscalización previa. Eso atenta contra la Constitución”, aseveró durante una entrevista en el programa Los Desayunos, de Televisión Española.
Para Rivero, la sugerencia en este sentido del ministro de Economía, Luis de Guindos, “es como si la Unión Europea se lo pidiera a España porque no ha cumplido” y aprovechó también para arremeter contra la política económica del PP, asegurando que ha incumplido la receta que anunció durante la campaña electoral de bajada de impuestos para generar actividad económica.
En esa línea, dijo también que las comunidades que “tienen más dificultades” son “las que llevan tiempo gobernadas por el PP, como Valencia”, aunque reconoció no saber si la decisión de Valencia de pedir un aval del Estado en el anterior Consejo de Política Económica y Fiscal era “mas una posición sólida desde la creencia de que era necesario o una pose partidaria para poner contra las cuerdas al PSOE” antes de dejar el Ejecutivo.
Mensaje de confianza
Por otra parte, Rivero no espera medidas adicionales de recortes o anuncios relevantes en la reunión de consejeros de Economía de las comunidades y el Gobierno central, sino más bien la escenificación y el lanzamiento de un “mensaje de confianza para los mercados”.
“No creo que sea el escenario de recortes estatales ni de fijar el techo de gasto, que ya lo tenemos fijado en el 1,3. Más bien se trata de dar un mensaje externo, a los mercados de confianza, que interno”, consideró.
El presidente canario valoró también una posible subida del IVA: “De poco valen los compromisos del PP. Decía que el camino era la bajada de impuestos y han hecho todo lo contrario. El tema del IVA, si tienen que ajustar en 2012, va a ser difícil, porque en la economía no hay milagros. O generan actividad económica o los márgenes son bastante estrechos”, concluyó.