Podemos ha acusado este martes al Gobierno de Canarias de despreocuparse “y pasarle la pelota” al Cabildo de Fuerteventura a la hora de poner en marcha el mandato del Parlamento regional de elaborar un proyecto de conservación para los grabados rupestres en la Montaña de Tindaya.
La portavoz de Podemos en el área de Cultura, Natividad Arnáiz, afirma en un comunicado que “las únicas noticias que hemos tenido del Gobierno de Canarias es que han adjudicado 10.000 euros para ello al Cabildo de Fuerteventura”.
Sin embargo, añade la parlamentaria, el Gobierno “falsea la realidad”, pues ese dinero ha sido destinado para un proyecto distinto al que se había pedido “y la Consejería no ha fiscalizado que se haya gestionado con eficacia y eficiencia”.
“Empiezan la casa por el tejado, ya que primero tendrá que saberse en qué condiciones están los petroglifos y protegerlos antes de iniciar un plan para señalizarlos y subir a visitarlos, que es lo que ha asegurado el consejero de Turismo y Cultura, Isaac Castellano, al afirmar que se han ejecutado 5.000 euros de subvención finalista solo para ese fin”, afirma Arnáiz.
Además, la diputada insiste en que se desconoce qué ha sucedido con los 5.000 euros restantes y que “el Gobierno ignora qué pasa con un dinero público cuyo deber es investigar que se invierta para lo que se dotó”.
Mientras tanto, continúa la diputada, la gente sigue subiendo a la Montaña y como consecuencia, este verano tres paneles han sido destruidos, dos han desaparecido parcialmente de forma irreversible y otro de ellos ha sido “decorado” con un “bonito grafiti” en forma de corazón“.
“Los actos vandálicos ocurren cada día, nuestro patrimonio sigue desapareciendo de forma irreversible y no sabemos si en el Gobierno de Clavijo llegan a comprender lo que significa irreversible, esto es, que se ha perdido para siempre”, agrega Arnáiz.
Aunque la diputada recuerda que la responsabilidad de impedir que la gente siga subiendo a la Montaña es del Cabildo de Fuerteventura, añade que “este Gobierno también es responsable por no hacer nada y este Parlamento también, porque fue capaz de votar en contra de que Tindaya fuera candidata a ser Patrimonio de la Humanidad”.
Para Arnáiz, Gobierno y Parlamento son “como el perro del hortelano”, pues “ni dejan que otros protejan la Montaña de Tindaya, ni tampoco son capaces de protegerla desde aquí”.
“Podríamos tener subvenciones para proteger Tindaya y, sin embargo, tenemos promesas incumplidas por parte del Gobierno de Canarias y del Cabildo de Fuerteventura que se traducen en destrucción del Patrimonio. Actuando así pierden toda legitimidad cuando afirman que protegen la Montaña”, asegura Arnáiz.