La posible censura en Granadilla de Abona contra la alcaldesa socialista Jennifer Miranda siempre ha dependido de los dos ediles del PP que cogobiernan con el PSOE, Marco Antonio Rodríguez y Bianca Cerbán, y en la dirección regional de los conservadores ya dan por casi imposible convencerles para que reviertan el gobierno local. Pese a los intentos de los últimos meses, intensificados mientras se negociaba la censura en el Puerto de la Cruz y, sobre todo, tras su confirmación, así lo admitieron este miércoles y ratificaron este jueves a Canarias Ahora fuentes al más alto nivel de la dirección regional del partido, que aseguran que lo seguirán intentando, pero que admiten ser “muy pesimistas” ante la posibilidad de lograr que sus dos representantes en uno de los ayuntamientos más importantes de Tenerife sigan las directrices marcadas desde el comienzo del mandato, cuando ya les instaron a hacer alcalde a José Domingo Regalado (CC), al que sí apoyaron, tras firmar un acuerdo de gobierno no ratificado por el PP local, los dos ediles de Vox.
Las fuentes de la dirección del PP canario reconocen también que la postura de los dos ediles en Granadilla impide resolver el “marrón” (con esa palabra lo describen) que tiene el partido en este municipio, toda vez que tienen abierto un expediente de expulsión precisamente por no obedecer las directrices dadas ni rectificar en este primer año y tres meses de gobierno. Hasta ahora, diversas fuentes del PP regional y de Tenerife habían presentado a este periódico dichos expedientes como “dormidos”, que se mantenían vigentes “pero de aquella manera”. Una fórmula para intentar no acelerar el proceso ni las expulsiones en un intento de resolver la situación por las buenas con el menor coste para las distintas partes y siempre con el objetivo del resto del PP insular y regional de revertir este ayuntamiento y otros (como Arico, Güímar y hasta Icod de los Vinos).
Sin embargo, y según admiten las citadas fuentes regionales y otras consultadas el miércoles pasado y hoy, el partido se enfrenta a una situación difícil en Granadilla que abre diversos escenarios: acelerar y culminar el expediente de expulsión, crear una gestora y buscar candidatos alternativos para las próximas elecciones en el caso de que Rodríguez y Cerbán no cambien.
En el caso de Granadilla, un gobierno alternativo de CC, PP y Vox no necesita, ni siquiera, el concurso de los dos representantes expedientados de los populares. A los 10 ediles nacionalistas y los 2 de Vox, que mantienen su acuerdo local si suman según confirman a Canarias Ahora fuentes de CC también de máximo nivel, solo les falta un voto más de uno de esos dos ediles del PP para propiciar el cambio.
Hasta ahora, tanto Rodríguez como Cerbán se han mostrado claramente en contra de apoyar una censura. No obstante, fuentes del PP admitían tener esperanzas de que uno de ellos, que expresaba “más dudas”, acabase aceptando las directrices y propiciando el cambio. En principio, todo apuntaba a que se referían a Rodríguez, dada la defensa numantina que ha hecho siempre Cerbán del acuerdo con el PSOE. El propio Rodríguez reconocía a este periódico que estaban “trabajando muy bien” con los socialistas, aunque admitía que “no sé qué puede pasar mañana, y más en política”. Además, desconocía qué iba a ocurrir con su expediente de expulsión y decía sentirse en “un limbo”, si bien recalcaba que siempre votaría y se sentiría del PP. El pesimismo reinante ahora en la dirección regional sobre la posibilidad de cambio ha acentuado esa sensación de “marrón” para el partido por la situación en Granadilla.
Además, otras fuentes del PP tienen claro que la reversión será “imposible” mientras sigan en CC los ediles Marcos González y Yanira González, exconcejales del PP que se dieron de baja durante el mandato anterior en pleno gobierno CC-PP y acabaron en la plancha nacionalista.
Rechazo de la asamblea de Arico Somos Todos a pactar con cualquier partido
Mientras la dirección regional del PP cree casi imposible revertir el gobierno de Granadilla, la asamblea de Arico Somos Todos (AST) decidió el pasado martes rechazar cualquier acuerdo con otros partidos del ayuntamiento al entender que todos (el PSOE y PP que ahora cogobiernan) o CC siguen las mismas líneas y políticas inadecuadas para el municipio.
A diferencia de lo que hizo, en votación, la Asamblea Ciudadana Portuense (ACP), que respaldó una censura contra Marco González (PSOE) por 15 votos a favor, 6 en contra y 3 abstenciones de las 24 personas que participaron en la votación del 31 de julio pasado, los miembros de esta formación local que sigue unas órbitas ideológicas y asamblearias similares han dejado claro su oposición a participar de una censura contra Olivia Delgado (PSOE).
Y lo hacen pese a que, como reflejan en un comunicado difundido hoy, discrepan por completo de la gestión de la socialista y los dos ediles del PP que incorporó al gobierno tras un decreto, después de ser la candidata a la Alcaldía más votada en el día de la toma de posesión, dado que no hubo acuerdo alternativo y los 6 votos del PSOE, los 3 de CC, los 2 del PP y los otros 2 de Arico Somos Todos.
En ese comunicado, la formación asamblearia deja claro su apoyo a los dos ediles que tienen en el consistorio, a las mociones que han presentado y a su trabajo, al tiempo que habla de “situación crítica” del ayuntamiento “con muchos de sus empleados y con una gestión deficiente en infinidad de problemas que preocupan a los vecinos”. Además, recalca que este partido “solo” obedece a los intereses locales, que sus líneas de trabajo “no han cambiado y siguen reflejadas en su programa” y creen que el resto de fuerzas “son todas iguales y sus intereses no son la defensa del municipio. (…) Sabemos el coste que tiene para Arico, pero respetamos la democracia, que se refleja en el actual desgobierno. No confiamos en la capacidad de la actual alcaldesa y su gobierno para gestionar los problemas que sufre Arico desde hace décadas”.
Hasta ahora, el portavoz del PP aríquense y primer teniente de Alcalde, Andrés Martínez, ha optado por declinar hacer declaraciones pese a las peticiones de este periódico desde el pasado mes de agosto. Aunque las direcciones superiores de su partido también han tratado de revertir este gobierno en línea con la mayoría de sus pactos, con el intento en Granadilla y en busca de hacer lo propio en Güímar, desde el principio lo han visto diferente al caso granadillero porque no se desobedeció ninguna orden de acuerdo alternativo, la entrada en el gobierno fue posterior y por pacto local entre el PSOE y PP que no fue rechazado por el partido a otras escalas por no existir, en principio, ninguna alternativa dada la postura de AST (ratificada este martes) y porque el PP tendrá la Alcaldía el próximo año. No obstante, y tras lo ocurrido en el Puerto de la Cruz, se barajó la opción de convencer a Arico Somos Todos y obtener ya la alcaldía porque CC estaba dispuesta, según fuentes del PP y de los propios nacionalistas, a ceder en este municipio a cambio de Granadilla. Posteriormente, el PP intentó vincular estos intentos de operaciones desde arriba con el caso de Guímar.