Los trabajadores de la empresa concesionaria del servicio de recogida de residuos sólidos de la Mancomunidad del Norte de Gran Canaria, en huelga indefinida desde el 8 de septiembre en demanda de mejoras laborales, comenzaron una huelga de hambre y un encierro.
Así lo anunció en un comunicado el delegado de personal de la empresa, Urbaser, Fernando Moreno, quien indicó que este encierro, que se llevará a cabo desde hoy en la sede de la Mancomunidad del Norte de Gran Canaria, ubicada en el barrio de Quintanilla del municipio de Arucas, y la decisión de iniciar una huelga de hambre se produce por los “engaños” a los que se han visto sometidos los trabajadores “en dos ocasiones” por parte de la concesionaria desde que iniciaron la huelga indefinida.
“Hemos sido engañados en dos ocasiones y no nos han dado solución al preaviso de huelga indefinida que comenzamos el pasado día 8 de septiembre”, refirió Moreno en el comunicado.
El pasado 26 de agosto, el delegado de personal de Urbaser explicó que los trabajadores tomaban la decisión de emprender una huelga indefinida ante “la negativa” de la Mancomunidad a “negociar el convenio de empresa y a la falta de condiciones para hacer el trabajo”.
Fernando Moreno afirmó entonces que los trabajadores carecen de “camiones en condiciones” y que también se quejan de la “falta de instalaciones para el depósito” de los mismos “y para los servicios del personal, como duchas, taquillas, comedor y baños”.
La empresa Urbaser es la concesionaria del servicio de recogida de residuos sólidos de los municipios grancanarios de Artenara, Teror, La Aldea, Valleseco y Santa María de Guía.