El presidente del Gobierno, Paulino Rivero, podrá intervenir hasta tres horas y media durante el último Debate sobre el estado de la Nacionalidad de esta legislatura, y que se celebrará los próximos 22 y 23 de febrero, frente a los 55 minutos que podrán usar los tres portavoces de las distintas fuerzas parlamentarias.
Este reparto de tiempos, acordado este lunes en la Mesa y la Junta de Portavoces, solamente se verá reducido para el presidente si Rivero opta por contestar conjuntamente a José Manuel Soria (PP), José Miguel Barragán (CC) y Manuel Marcos Pérez. En ese caso, en vez de optar a 20 minutos por cada uno, Rivero usaría 30 minutos para dirigirse a la totalidad de los portavoces, lo que dejaría su cómputo global en tres horas.
Con todo, la intervención de Rivero será más corta que en anteriores debates de política general, pues aunque CC y el propio Ejecutivo querían que se usase el mismo cómputo que en las otras tres ocasiones, tanto el PP como el PSC se han opuesto a esa pretensión.
Según lo acordado, Rivero comenzará su balance en la mañana del 22 de febrero con una intervención en la que podrá consumir hasta dos horas en la tribuna de oradores para resumir los logros de su Presidencia durante la legislatura y demostrar que su actuación al frente del Ejecutivo regional ha cumplido con los compromisos adoptados durante su investidura el 11 de julio de 2007.
Tras la intervención del presidente, la sesión parlamentaria quedará suspendida hasta por la tarde, que será reiniciada por Soria como primer portavoz que, por un total de 40 minutos, dará la réplica al discurso de Rivero. Tras el líder del PP, Rivero puede decidir contestarle o bien esperar a todas las intervenciones para subir a la tribuna.
Si el presidente opta por un cara a cara, estrategia que ha rechazado durante toda la legislatura, podrá intervenir por 20 minutos y, a continuación , Soria podrá contrarreplicarle por 10 minutos más. De ser así, el debate se repetirá igual para el caso del nacionalista José Miguel Barragán y del socialista Manuel Marcos Pérez.
En caso de que Rivero, siguiendo su técnica habitual, no intervenga hasta el final, tras Soria subirá a la tribuna Barragán y, posteriormente, el presidente del único grupo que ha estado en la oposición durante la legislatura y que, además, es el mayoritario en la Cámara.
Con todo, y en el mejor de los casos para el PSC; el presidente del Grupo Socialista no podrá replicar en la tribuna a Rivero hasta que hayan pasado, como mínimo, cuatro horas de su intervención inicial.
Tras el debate, además, el presidente tiene una nueva oportunidad de intervenir por 30 minutos para cerrar el debate sobre política general que, al ser el último, se convierte tanto en un examen de la legislatura como el pistoletazo de salida de la confrontación electoral que culmina el 22 de mayo.
Al día siguiente, 23 de febrero, los grupos parlamentarios presentará, debatirán y aprobarán las distintas propuestas de resolución, con la novedad de que, debido a la ruptura del Pacto, ésta será la primera vez durante la legislatura que el PP no las presentará de forma conjunta con CC.