SANTA CRUZ DE LA PALMA, 11 (EUROPA PRESS)
El Servicio Canario de Salud comunicó al jefe de servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología (COT) del Hospital General de La Palma que debía abandonar el centro “al no haber solicitado la renovación de la comisión de servicio” a pesar de que el profesional sí lo había hecho en tiempo y forma a través de un fax, quince días antes de que finalizase el plazo.
El pasado 4 de julio y 90 minutos después de que Europa Press hiciese público el rechazo del doctor Almenara a la orden de dejar de operar en el periodo estival la dirección médica del Hospital de La Palma le comunicó que debía “retirar sus cosas del centro, entregar las llaves del despacho y abstenerse de actuar como facultativo” del centro. La razón era, según el escrito, que no había solicitado la renovación de la comisión de servicio.
A pesar de esto y según la documentación a la que ha tenido acceso Europa Press, el jefe de servicio de COT “y con plaza en propiedad en el Hospital Materno Insular” pidió a través de un fax con fecha 17 de junio --el plazo vencía el día 30-- su continuidad en La Palma. Esta solicitud y tras la comunicación de la Dirección se repitió el pasado seis de julio a través de un burofax.
El doctor Almenara lleva ejerciendo su profesión en el hospital palmero desde hace seis años en comisión de servicios y ha mantenido una actitud crítica con algunas de las decisiones que toma la nueva gerencia del hospital. Entre ellas, la orden de no operar durante el periodo estival.
RESPALDO DE COMPAÑEROS
Tras tener conocimiento de la no renovación de la jefatura del servicio COT, los compañeros del doctor Almenara han solicitado a la dirección y gerencia del hospital que “reconsidere” su decisión y se renueve de forma “inmediata” al profesional.
“La labor ejercida desde el punto de vista profesional ha conseguido dar un vuelco a la traumatología en este hospital y un cambio de mentalidad en la sociedad palmera, mejorando con creces tanto la calidad asistencial como la opinión y percepción de la misma por los pacientes”, asegura el escrito.
En esta línea, defienden sus compañeros que la dinámica de trabajo implantada por Almenara “es la mejor que se puede llevar a cabo dados los recursos con los que contamos, que en muchas ocasiones se han demostrado insuficientes”. Le achacan la creación de un “ambiente de máximo rendimiento y cooperación”.
Por último ponen de manifiesto que la marcha de Almenara supone un “error, que pone en peligro el servicio”.