Don Juan Carlos y doña Sofía entraron en la calle Triana pocos minutos antes del mediodía, acompañados del presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín, del ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, el delegado del Gobierno, José Segura, y el presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Manuel Soria.
A su llegada a la calle Mayor de Triana, la Reina Doña Sofía recibió un ramo de flores de una niña, a la que correspondió con un beso entre los aplausos de los centenares de ciudadanos que presenciaron la escena, y que ondeaban pequeñas banderas españolas repartidas previamente por el Ayuntamiento.
Tras esto, los Reyes saludaron uno a uno a todos los concejales del Ayuntamiento capitalino, con la alcaldesa Josefa Luzardo al frente. Allí, la alcaldesa mostró a los Reyes los restos que se han conservado de las líneas del tranvía que funcionó por el centro de la ciudad hasta el año 1946, llamado La Pepa, y que las obras de reforma del piso de la calle Mayor de Triana han permitido recuperar y dejar a la vista para el recuerdo ciudadano.
Ya en Vegueta, y después de un breve paseo por la plaza de Santa Ana, al frente de la catedral, los Reyes y las autoridades canarias se han dirigido al Obispado, donde han saludado al Obispo Francisco Cases, antes de asistir a la misa en la Catedral de la ciudad, que empezó a las 13.00 horas. A la entrada de la catedral, Ana Sánchez, de tres años, entregó unas flores a la Reina. Lo curioso del caso es que esta niña es tataranieta de la niña que hace cien años le entregó a Alfonso XIII otro ramo de flores en su visita a la capital.
La plaza de Santa Ana, así como el tramo de la calle de Triana que conocieron los Reyes, se abarrotaron. Acompañados de un timple, un grupo de ciudadanos cantaba “que viva el Rey, que viva el Rey, y que viva la Reina, que viene también”.
Durante todo el recorrido a pie que realizaron por las calles de la capital grancanaria, los Reyes no pararon de saludar a las miles de personas allí congregadas. La visita de este domingo por las calles de Las Palmas de Gran Canaria se produjo bajo un intenso calor y un sol radiante, en contraste con el viento y la lluvia que se encontraron los monarcas en su visita a la isla de Fuerteventura.
La presencia de ciudadanos para ver a los Reyes ha sido muy numerosa, en un día además que ha llenado la playa de Las Canteras y que también ha abarrotado la Avenida Marítima de la capital, desde donde podía presenciarse la salida de la regata ARC que parte hacia el continente americano.