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Subdelegado de Gobierno en Tenerife califica de “algo habitual” su conversación grabada intercediendo por un extranjero

Batista vincula la filtración a que es la semana del “pin, pan, pun, fuego” por la comparecencia de Rivero en el Parlamento canario

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 21 (EUROPA PRESS)

El subdelegado del Gobierno en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, José Antonio Batista, aseguró hoy que la conversación que se ha hecho pública dentro de los pinchazos del 'caso Arona' sólo reflejan “algo habitual” del desempeño de su cargo y achacó las filtraciones a que estamos en la semana del “pin, pan, pun, fuego” al comparecer el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, en el Parlamento para responder a una interpelación sobre una llamada que realizó al alcalde de Arona.

Batista ironizó sobre su grabación y dijo que a este paso y por el número de políticos de los que se han conocido conversaciones grabadas habría que hacer “un 'hit parade' de salidas en el caso Arona”. En todo caso, aseguró en declaraciones a Canarias Radio La Autonómica recogidas por Europa Press que “lo que sale hoy transcrito es el trabajo que se hace aquí habitualmente de resolver un problema de un ciudadano”.

En este sentido, explicó que otra cosa sería que en esa llamada existiera o se reflejara algún tipo de irregularidad, cosa “que en este caso no lo hay”. “Que alguien te venga con una situación desesperada no hace que cometas irregularidades, porque a mi me ha llegado gente desesperada, con auténticos dramas personales pero que no puedes resolverlo porque hay una ley que te lo impide”, explicó.

Batista lamentó que “desafortunadamente el daño” a su imagen como subdelegado “ya está hecho”. “Ya han manchado mi nombre como subdelegado, no como persona, y solo queda tratar de explicar que eso es algo habitual. Si hubiera grabadora en mi despacho, habría cientos de estas conversaciones con gente pidiendo ayuda. Y son situaciones que a veces se pueden resolver y otras no”, garantizó.

En todo caso, dijo no querer entrar en la “locura de que todo el mundo tiene teléfonos pinchados”. “Hay un señor que está siendo investigado y tiene con orden judicial el teléfono pinchado, yo llamo a este señor para una gestión que me pide él antes como cualquier otro ciudadano y alguien lee esto y dice mira el subdelegado llamando a este, y luego los medios lo publican”, razonó.

El subdelegado insistió en que lo que se ha publicado está “totalmente descontextualizado” y dijo que ha sido, “entre comillas, víctima de estas filtraciones” del 'caso Arona', porque --quiso dejar claro-- ni él ni los “los funcionarios de extranjería van a colar ninguna irregularidad”.

“NI IDEA DE POR QUÉ SANTAMARÍA TENÍA INTERÉS EN REGULARIZARLO”

Sobre el contexto, Batista quiso dejar claro que esta petición de ayuda le llegó a través de un concejal socialista del municipio de Arona, Paco Santamaría, del que no tiene “ni idea de porqué el concejal tenía interés en regularizarlo”, aunque según le explicó “había sido víctima del desplazamiento de la guerra de Los Balcanes” y tenía a su “familia dispersa”.

“Le puse una cita como hago con todo el mundo. A la reunión creo que vino hasta el señor Santamaría. Había solicitado un arraigo que le habían denegado por una cuestión penal. Yo desconozco el caso aunque creo que estaba firmada por mi la resolución, hago fotocopia y tomé el teléfono del señor. Llamé a la oficina de extranjeros, que es algo que hago habitualmente, me explicaron el problema y la posible solución [tenía una sentencia absolutoria o archivada por una causa en Barcelona], y yo le dije al afectado que ahí lo que se puede hacer es presentar un recurso adjuntando la sentencia absolutoria o cancelando los antecedentes penales. Eso es todo”, explicó.