Televisión Canaria pide seis millones de euros para garantizar su supervivencia

Efe

Santa Cruz de Tenerife —

El presidente del Consejo Rector de Radiotelevisión Canaria (RTVC), Santiago Negrín, lanzó este viernes un mensaje de auxilio al Parlamento para que apruebe un presupuesto adicional de seis millones de euros que permita garantizar la supervivencia de la televisión pública hasta fin de año frente a un deterioro “progresivo y sangrante”.

Negrín, que compareció a petición propia ante la comisión de control de RTVC del Parlamento de Canarias, señaló que los 3,5 millones de euros de recorte presupuestario en 2016 y la disminución de ingresos publicitarios en un millón adicional han obligado a cancelar programas, y hasta 400 personas que trabajan en pequeñas productoras han perdido sus ingresos.

Ninguno de los representantes de los grupos políticos apoyó abiertamente ese incremento presupuestario, si bien se mostraron comprensivos con las demandas y comprometidos con la supervivencia de la televisión autonómica.

Anunciaron que estudiarán la propuesta del presidente del Consejo Rector, aunque algunos de ellos demandaron más concreción en los planes, más transparencia en las cuentas y más pluralidad en los programas informativos.

Santiago Negrín explicó que el presupuesto de Televisión Canaria ha pasado de 61 millones de euros en 2008 a 27,9 millones en 2016, y en ese periodo la audiencia media ha caído del 10,2% al 5,3.

“Con la reducción presupuestaria se ha reducido la presencia en la parrilla de producciones propias y ha habido una caída generalizada de los ingresos publicitarios”, dijo.

Eso llevó a la supresión de marzo pasado de dos magazines de actualidad, detalló el presidente del Consejo Rector, lo que al final perjudica a las empresas productoras locales y al empleo.

“Queremos recuperar la producción propia la próxima temporada con una nueva programación”, pero para eso hace falta un incremento presupuestario que Negrín calculó en cinco o seis millones de euros, con los que se podría dar estabilidad a la industria audiovisual y recuperar audiencias.

“En estos momentos estamos en régimen de pura supervivencia”, dijo Negrín, y demandó recursos para poder transformar la programación y dotarla de más voces, más pasión y más vida.

La columna vertebral seguirían siendo los servicios informativos, que son “impecables”, arropados con dos magazines diarios de actualidad, y nuevos programas de entretenimiento para el prime time, además de un innovador programa de análisis diario en esa franja horaria.

En los fines de semana, los planes incluyen un gran programa “contenedor” de deportes en el que tengan cabida deportes masivos y minoritarios y de todas las categorías, incluidas las competiciones juveniles e infantiles.

Para afrontar esa nueva programación “pedimos lo que perdimos, lo que hemos dejado de percibir” desde 2015, dijo Negrín, quien aseguró que ya no les quedan “agujeros en el cinturón” para recortar ni fuentes de ingresos publicitarios que no hayan explorado.

Sólo con el respaldo de la comisión de control de RTVC se puede materializar el cambio para afrontar la situación hasta fin de año y dar estabilidad al sector audiovisual, lo contrario sería “el deterioro progresivo y sangrante de un proyecto que tanto ha costado”, concluyó Negrín.

Los grupos parlamentarios se comprometieron a estudiar las demandas de Negrín, si bien la diputada del PP Cristina Tavío fue la más reticente por la dificultad de destinar dinero para la televisión cuando no hay para las listas de espera o la dependencia.

Apuntó además que la gestión de la Televisión Canaria “tiene una historia de sombras y sospechas”, así que sería necesario que el presidente del Consejo Rector demuestre que se están haciendo las cosas de otra manera, sin opacidad en las contrataciones.

También demandó más pluralidad en los programas informativos para que dejen de ser propaganda electoral de un determinado partido.

La pluralidad informativa fue también una exigencia de Podemos, cuyo diputado Francisco Déniz preguntó por qué está todo el día en la televisión el alcalde de Santa Cruz de Tenerife y apenas aparecen representantes de Podemos pese a sus superiores resultados electorales el 20 de diciembre.

Juan José Márquez, también de Podemos, dijo que su partido es crítico con la gestión de RTVC y con la precarización de sus trabajadores, cuyas condiciones en algunos casos “no son aceptables”, pero a la vez defendió su permanencia como elemento de cohesión, difusión cultural y promotor del tejido empresarial audiovisual, por lo que pidió un estudio económico concreto de las propuestas.

Ana González, del PSOE, pidió información detallada sobre el destino de los recursos antes de decidir, así como garantías de que las cosas se van a hacer de manera diferente al pasado y de que se producen avances.

“Queremos máxima transparencia sobre el destino de los recursos que pide y tener claro qué hace el ente para ajustarse y que ha explorado todas las fuentes de ingresos posibles”, señaló la representante del PSOE.

Guadalupe González Taño, de Coalición Canaria, dijo que su grupo va a colaborar para que RTVC salga adelante y se mostró partidaria de buscar fórmulas de consenso sobre cómo hacerlo.