El Pleno del Cabildo de Tenerife ha aprobado este miércoles --con el voto en contra del Partido Popular- el Plan de Acción por el Empleo, un proyecto dotado con un presupuesto de 2 millones de euros que permitirá a las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la Isla contratar a más de un millar de personas en un año.
La primera de las cuatro convocatorias previstas en esta primera fase del plan se publicará a finales de septiembre, y las empresas que accedan a esta subvención podrán recibir hasta 60.000 euros en el caso de realizar un total de quince contratos indefinidos por jornada completa.
En concreto, por cada contrato se abonará un total de 4.000 euros que corresponderán a cuatro meses. Estos importes se reducirán en proporción a la jornada realizada por el trabajador, salario y cotización a la Seguridad Social.
La duración mínima de los contratos será de tres meses y las empresas beneficiadas deben comprometerse a mantener durante un año el 25% de los contratos subvencionados, con un mínimo de un contrato por cada cuatro nuevos empleos.
Por su parte, las empresas tendrán que mantener contratados como mínimo a una persona durante un año a partir de la concesión de la subvención. A diferencia de otro tipo de ayudas concedidas por otras administraciones, las aportaciones del Cabildo para la contratación se llevarán a cabo de forma inmediata y podrán complementarse con otras subvenciones puestas en marcha por parte del Ejecutivo canario.
El desarrollo del Plan se realizará a través de la Fundación Insular para la Formación y el Empleo (Fifede), que se encargará también de asesorar a las empresas para que puedan acceder a las ayudas de manera eficaz.
Como apoyo a este plan, Fifede, a través de su Agencia de Colocación, desarrollará un programa integrado que parte de las necesidades y demandas de los beneficiarios y del mercado laboral, colaborando directamente con las empresas del entorno y en donde se desarrolla un conjunto de actividades personalizadas de orientación, formación, intermediación y seguimiento.
Específicamente, los colectivos de atención prioritaria son los demandantes de un primer empleo menores de 35 años, las personas que hayan estado más de dos años sin cotizar a la Seguridad Social, los demandantes de empleo que en los últimos dos años hayan cotizado un máximo de seis meses de forma discontinua a la Seguridad Social y los perceptores de rentas mínimas de inserción.