Un profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria en huelga de hambre por sentirse acosado laboralmente

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 25 (EUROPA PRESS)

El alemán, Detlef Reineke, profesor de Traducción e Interpretación en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) ha decidido iniciar una huelga de hambre por sentirse acosado laboralmente desde hace siete años por parte de sus superiores de la Facultad y del Departamento de Filología Moderna.

Por ello, Reineke decidió el pasado 8 de febrero ponerse en huelga de hambre, tomando sólo zumos naturales. Además este alemán ha afirmado que está dispuesto a llevar hasta las últimas consecuencias su decisión.

En concreto, el profesor ha exigido al rector de la ULPGC, José Regidor, anular de oficio un expediente disciplinario heredado de la etapa de Manuel Lobo (actualmente consejero de CC en el Cabildo de Gran Canaria) y que en 2006 le impidió transformar su contrato administrativo en laboral, según informó el periódico digital Canariasahora.com y recoge Europa Press.

Por ello, apunta como culpables de la situación que vive actualmente al anterior rector Manuel Lobo, a su decana María Jesús García Domínguez, con quien Reineke fue vicedecano de Relaciones Internacionales, y al director de su departamento Santiago Henríquez Jiménez.

Para Reineke el problema se centra fundamentalmente en “rencillas personales” con la decana que, según él, promovió expedientes contra su persona desde 2003, a raíz de su dimisión como vicedecano en 2002, hasta fructificar uno de ellos en 2005.

EL RECTORADO ESTUDIANDO EL CASO

Por su parte, el Rectorado ha decidido estudiar el caso, tras ver el paso dado por el profesor. Así, fuentes oficiales de la ULPGC han confirmado que Reineke presentó formalmente el 19 de febrero un escrito al rector, después de que este lo remitiera el pasado lunes al Servicio de Inspección de la Universidad para conocer si Regidor puede anular de “oficio” un expediente disciplinario.

El escrito se realizó a iniciativa del rector porque hasta el momento, y a pesar de informes y solicitudes de la junta de personal docente e investigador a favor del profesor, no se había reclamado concretamente la revocación de la sanción.

Por ello, la propia Universidad se ha dirigido ya al Consejo Consultivo. “Su caso está en estudio, el rector no puede actuar sin tener toda la legalidad en su mano mientras no exista una resolución clara; nos hemos tomado con interés y preocupación el caso hasta el punto de recibir al profesor el martes pasado sin tener cita”, apuntan desde el Rectorado de la ULPGC.

Para Reineke su caso podría ser resuelto de inmediato “sin tener que infringir leyes y sin tener que contradecir sentencias”, por haber sufrido un expediente sancionador “nulo de pleno derecho” debido a la falta de tipicidad de las supuestas faltas cometidas, además de haber sido vulnerado sus derechos fundamentales. Apela a los artículos 105 y 62 de la Ley de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas.

REINEKE HA RECIBIDO DIVERSAS SANCIONES

El docente ha recibido, desde 2005, varias sanciones. En concreto, en 2005 se le sancionó con cuatro meses de empleo y sueldo por pretender alterar el Plan Docente, ya que quería cambiar días y horas de sus clases para poder asistir a una conferencia como invitado --algo habitual y normal entre el profesorado de acuerdo con sus alumnos--; pero por la grabación de una junta de facultad sin el consentimiento de los asistentes se estimó que no hubo pruebas fehacientes.

De todos modos, la sanción provocó que el profesor asociado a tiempo completo no sólo viera imposibilitada la transformación de su contrato administrativo en laboral --como otros 500 colegas en virtud de la Ley de Organización Universitaria--, sino que a finales de 2006 fue despedido de la ULPGC.

Ante este hecho, Reineke decidió acudir a los tribunales ordinarios, que fallaron en su contra sin entrar en el fondo, por defectos de forma al haber expirado el plazo para recurrir la sanción impuesta.

Sin embargo, desde el Rectorado mantienen que la presunta persecución y acoso laboral sufrido por Reineke no se sustenta ahora con el actual equipo rector, ya que en abril de 2008, después de año y medio fuera de la Universidad, ganó una plaza como profesor a tiempo parcial, que ejerce en la actualidad mientras lleva a cabo su huelga de hambre.

Pero Reineke denuncia que, también en ese momento, un grupo de profesores llegó a remitir un escrito a Regidor, el actual rector de la ULPGC, en el que se le pedía que de ganar el profesor alemán la plaza, se eligiera al segundo. Al respecto, el docente aseguró haber solicitado al Rectorado dicho escrito para poder actuar contra los firmantes y no se le ha entregado.

En este sentido, el profesor alemán consideró que esta situación le convierte “en un proscrito”, ya que ha dejado de percibir hasta un 70 por ciento de los ingresos que obtenía antes del conflicto, en el que también se vio involucrado un alumno por un presunto acoso sexual al profesor. En este caso, la justicia falló a favor del profesor con sentencia firme y orden de alejamiento al alumno y la Universidad tampoco actuó con celeridad a la hora de las peticiones de Reineke de abrir expediente al alumno.

Por todo ello, Reineke se considera perseguido y acosado laboralmente dentro de la Universidad. Además, aseguró que Regidor, que durante su campaña electoral de 2007 propuso encontrar una solución a su problema y, ahora, “mira para otro lado y no quiere arreglar esta situación injusta”.

De todos modos, el rector está reuniéndose en las últimas horas con miembros de la junta de personal docente e investigador para convencer a Reineke de que deponga su actitud; pero el profesor aseguró que sólo accederá si Regidor firma la revocación de su sanción y se le restituya el derecho a transformar su contrato a tiempo completo de 2006 en laboral.

Reineke ya ha puesto su situación en conocimiento de los gobiernos de España y de Alemania, ya que el mismo 8 de febrero informó de su decisión de iniciar su huelga de hambre, mediante correos electrónicos y llamadas de teléfono, a la Cancillería y al Presidente federal alemán, a la Embajada de su país en Madrid y al Consulado en Las Palmas de Gran Canaria, así como al Rey de España y al presidente del Gobierno, mediante sendas cartas.

Además, desde este jueves ha decidido hacer pública su huelga de hambre en el propio Edificio de Humanidades donde imparte clases.