En el barómetro del CIS de marzo la mayoría de los entrevistados se declara defensor del actual modelo autonómico (33,4%), frente a los que prefieren un estado centralizado (18,6%), mayor autonomía (11,9%) o, por el contrario, recortes en la misma (10,7%). La posibilidad de acceder a la independencia es apoyada por el 9,5%, mientras que un 15,9% no sabe/no contesta. Si cruzamos los datos con lo que los encuestados dicen haber apoyado electoralmente en 2011, los votantes de PP y UPyD aparecen como los más centralistas, los de IU y PSOE los más autonomistas y los de CiU los que más reclaman el derecho a independizarse.
La mayoría se alinea con el mantenimiento del actual status autonómico (33,4%), pero mientras que los votantes de PP (32,8%) y UPyD (31,8%) se sitúan ligeramente por debajo en este aspecto, los del PSOE (41,1%) e IU (38,5%) lo hacen claramente por encima.
Si sumamos los dos perfiles más centralistas, los que apuestan por un estado único y los que solicitan reducciones en el autogobierno, aparecen de manera destacada los votantes de UPyD (48,5%) y el PP (47,6%), frente a una media de la muestra del 29,3%. El PSOE quedaría con 27,4% e IU con el 18,6%.
Por el contrario, si nos fijamos en los dos perfiles contrarios, los que apuestan por más autonomía o incluso permitir que una comunidad autónoma pueda optar por la independencia, la muestra llega al 21,4%. Y la encabezan los votantes de CiU (92,8%), a gran distancia de los de IU (33,7%), PSOE 18,5%, UPyD (9,1%) y PP 6,9%.
Autonomistas
Además, entre los que votaron en los comicios del 20-N a otros partidos es muy elevado el peso de sentimientos autonomistas y/o nacionalistas. En esta franja, sólo un 6,8% defiende un estado centralizado y un 3,1% pide reducir el poder de las autonomías frente a un 21,6% que desea mantener las cosas como están. Sin embargo, un 24,1% solicita mayor grado de autonomía y un 37% la posibilidad de constituirse como estado independiente.
Con relación al barómetro de febrero, lo más significativo es la bajada en 2,4 puntos de los que defienden un único estado central (18,6% frente al 21 de entonces) y en sólo uno de los que apoyan el actual status autonómico (33,4% en marzo, 34,4% en febrero), mientras que aumentan los que no saben no contestan, al pasar del 12,8% al 15,9%.
Respecto al estudio del CIS de hace un año, marzo de 2013, los defensores del estado único bajan casi seis puntos y los que aceptarían un recorte autonómico casi cuatro. Los que apoyan el derecho a conformar un nuevo estado se incrementan en 1,1 puntos.
La publicación del informe del CIS coincide en el tiempo con las polémicas declaraciones de Miguel Sebastián, ministro de Industria, Turismo y Comercio con José Luis Rodríguez Zapatero, que recientemente se mostró favorable a “diluir” el actual modelo y dejar sólo las tres comunidades históricas: Euskadi, Cataluña y Galicia.
Por otra parte, en el último barómetro del CIS, la mayoría de la muestra se posiciona en el centro político (28,5%), frente a un 24% de la izquierda moderada, un 9,3% que se sitúa a la izquierda de la izquierda, un 8,1% en la derecha moderada y un 2,1% en la derecha extrema. Aunque con un elevado porcentaje, casi un 28%, que o no sabe o no contesta.