Canarias continúa con importantes retos en materia educativa. La comunidad autónoma lleva dos años incumpliendo la ley regional que obligaba a que en 2022 se destinara el 5% del PIB a Educación, una financiación que sigue sin alcanzarse y que impide hacer frente a objetivos como una bajada ambiciosa de ratios (número de alumnos por docente) o mejoras en infraestructuras. En ese contexto, el consejero del área, Poli Suárez, ha presentado una propuesta a los sindicatos para bajar el número de estudiantes por aula el próximo curso que se ha vuelto a tener en consideración en la reunión de la mesa sectorial de este martes.
Hace unas semanas, durante la presentación del protocolo de Educación ante los episodios de olas de calor, el consejero aseguró que su objetivo es bajar las ratios “si se puede”. Según el plan presentado a los sindicatos, se prevé bajar de 27 a 25 el número de estudiantes en primero de la ESO y de 20 a 18 en el tercer curso de Educación Infantil. Así mismo, se aumentará el personal docente en 250 trabajadores y trabajadoras más.
Para Gerardo Rodríguez, portavoz del sindicato STEC-IC, se trata de un número “totalmente insuficiente”. Destaca que las elevadas ratios se concentran fundamentalmente en Secundaria y Bachillerato. Sin embargo, se prioriza en Educación Infantil, donde señala que se van a producir bajada de ratios por el descenso de la natalidad. Actualmente, la norma permite que haya 30 estudiantes en Secundaria y 35 en Bachillerato, pero “que sean las que dice la norma no quiere decir que sean las convenientes”, aclara Rodríguez a este periódico.
El sindicato ANPE también se ha pronunciado al respecto asegurando que a esa rebaja de ratios le falta “ambición” y ha recordado que el propio sindicato presentó el pasado año a la Consejería un plan plurianual para bajar ese número de alumnado por docente. “La reducción de ratios es fundamental para poder avanzar en atención a la diversidad”, dijo el presidente de ANPE Canarias, Pedro Crespo, en un encuentro con Educación.
“Vemos necesario trazar una hoja de ruta de reducción de ratios hasta el curso 2026-2027, coincidiendo con el fin de la legislatura. Es esencial despejar incertidumbres en el futuro próximo en lo relacionado con la disminución de ratios de la educación pública de Canarias, ya que consideramos que la rebaja planteada por la Administración es insuficiente por sí sola y debe entenderse como un primer paso”, recoge ANPE tras la reunión de este martes.
Por su parte, Gerardo Rodríguez incide en que también es “insuficiente” el incremento de personal, prevista en 250 profesores más. “Si se tiene en cuenta el déficit de plantilla que tenemos es canarias nos parece raquítico”, dijo.
De hecho, afirmó que con el mismo número de alumnos y alumnas e igual población, el País Vasco , Castilla La Mancha y Castilla León tienen entre tres y cuatro mil profesores más en Canarias. Así mismo, Rodríguez hace mención a que no se haya cumplido con la ley canaria que obliga a destinar el 5% del PIB a Educación. Por eso cree que hay deficiencias en el aumento de las plantillas, en las infraestructuras y en la bajada de ratios que solo se acomete en esos grupos.
ANPE hizo hincapié la pasada semana en la necesidad de avanzar hacia mejoras en las infraestructuras y en este punto destacó que aún existen barracones o aulas modulares, donde se dan problemas de accesibilidad. Sobre la bajada de ratios remarcó el alto número de alumnado con necesidades educativas especiales, que puede llegar a ser de cinco o seis estudiantes por aula. Realidades que son muy diversas y que en ocasiones se requiere de adaptación curricular.
Otras medidas del plan de bajada de ratios
Entre las medidas que planteó Educación se encuentra también que en centros con menos de ocho unidades habrá un docente de Pedagogía Terapéutica (PT) a tiempo completo o que en los institutos de más de 1.000 alumnos y alumnas se contemplarán dos profesionales de Orientación Educativa.
También se suprimirán los grupos mezcla en centros de más de ocho unidades por lo que se contará con una ampliación de plantilla de 51 profesores más, y se incrementará en 33 el número de profesores en audición y lenguaje y siete en el departamento de orientación.