El joven de 23 años acusado de matar a otro con un objeto punzante en el barrio de Schamann el pasado 12 abril de 2006 afirmó este viernes ante la Audiencia de Las Palmas que mantuvo ese día una pelea con la víctima, Rafael Alemán Medina, de 22 años, pero negó haberle apuñalado.
El acusado, José Eleazar R.N. se enfrenta a una pena de 15 años de prisión por un delito de homicidio con el agravante de abuso de superioridad, según pide la fiscal en sus conclusiones provisionales, al igual que el abogado de la acusación particular, Gonzalo Boye, mientras que su abogada, Josefina Navarrete, pide su absolución.
La letrada, antes de iniciarse la vista, manifestó a varios periodistas, que su cliente es inocente y que sólo mantuvo una pelea a puñetazos, y explicó que al fallecido se le condujo en una furgoneta al hospital que se dio a la fuga.
Navarrete sostuvo que sólo existen indicios que apuntan a su defendido, pero que no hay pruebas de su autoría, cuestión que tratará de demostrar al tribunal jurado que juzgará al joven en los próximos días.
Miradas amenazantes
La fiscal, sin embargo, sostiene en sus conclusiones provisionales que el acusado días antes del suceso estuvo apunto de atropellar a la hermana de la víctima, embarazada de 8 meses, y a su hija de 9 años, cuando se disponían a cruzar la calle, debido a que circulaba a gran velocidad su BMW.
Así mismo, indica que el día del suceso la víctima estaba en un bar cuando pasó el acusado de nuevo en su vehículo en un par de ocasiones, a la vez que reducía la velocidad y miraba hacia su interior.
La víctima, según la fiscal, interpretó esta actitud del acusado como una provocación, y decidió salir a buscarlo para pedirle una explicación por su comportamiento.
El acusado, recoge el escrito de acusación, aparcó su vehículo y fue advertido de que Rafael Alemán Medina le estaba buscando, por lo que cogió un objeto punzante de doble hoja y de al menos 20 centímetros de longitud y dos de anchura y aguardó a que llegara con el arma escondida.
Rafael Medina Alemán, en cuanto vio al acusado, se abalanzó sobre él y le dio dos puñetazos, mientras que José Eleazar R.N. cogió el arma que mantenía oculta y con “la clara intención de acabar con su vida, se lo clavó con todas sus fuerzas”, sostiene la fiscal.