El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria inspecciona la galería subterránea que conecta la calle Faro con la Casa Roja y Los Nidillos, en La Isleta, en busca del posible origen del vertido que afectó en las últimas dos semanas a la playa de El Confital.
Para ello, una dotación de trece efectivos y dos vehículos de Bomberos se han trasladado hasta la calle Faro para efectuar la primera incursión en el pasadizo, cuya longitud aproximada es de 600 metros.
“Se va a recorrer y estudiar con detenimiento esta galería, para saber si el origen pudo estar aquí o no. Hoy estamos en la calle Faro, pero en los próximos días, probablemente, también se podrá entrar por Los Nidillos y la casa roja”, indica el concejal de Ciudad de Mar y Movilidad, José Eduardo Ramírez.
“Esta no es la única acción que en este sentido vamos a realizar, ya que también vamos a monitorizar toda la zona de costa entre La Puntilla y El Confital sacando muestras cada cien metros más o menos”.
Junto a los bomberos, hasta la zona se desplazaron también este lunes efectivos de la Policía Local y operarios de Emalsa.
El Ayuntamiento encargó a Emalsa que visualizara la red de alcantarillado para ver si lo ocurrido estaba motivado por algún vertido de tierra a mar de la red de alcantarillado, pero el análisis llevado a cabo descartó esta posibilidad y se pensó, entonces que podía ser un almacenamiento de aguas residuales que estuviese durante años acumulado y que con la subida de mareas pudiese haber llegado al mar, indica la concejal.