La Plataforma de Familiares de los Fusilados de San Lorenzo calcula que más de 60 personas que fueron asesinadas durante la dictadura franquista se encuentran en la fosa común del cementerio de Vegueta. Por ello, el ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, tras llegar a un acuerdo con los afectados, ya ha iniciado una fase de documentación, un análisis de la construcción del cementerio y de cuál era el método que se empleaba para enterrar en estas fosas. El objetivo es determinar el lugar exacto donde se encuentran los fusilados de este municipio histórico para, posteriormente, valorar si es posible llevar a cabo la exhumación.
“Se trata de una tarea laboriosa”, expone el concejal de participación ciudadana del Consistorio capitalino, Sergio Millares. Y es que, durante este proceso tendrán que recabar los planos del cementerio, cómo se construyó, a la vez que información sobre cómo se colocaban a los fallecidos en estas fosas comunes, entre otras cuestiones. Además, añade que “hay que determinar en qué fosa exacta están, ya que hay entre seis o siete”, puntualiza.
Una vez dispongan de todo el material que está evaluando la comisión técnica se estudiará si tiene cabida abrir esta fosa, pero Millares insiste en que “el Ayuntamiento está totalmente implicado en este asunto”.
Por su parte, la Asociación Canaria de Víctimas del Franquismo celebra que el Consistorio haya dado los primeros pasos para avanzar hacia este objetivo. “El cambio de ideología política, tras las elecciones, puede haber influido”, asegura Hiurma Castejón, vicepresidenta de esta asociación. Según cuenta, durante el anterior mandato no recibieron ningún interés por esta causa por parte de los gobernantes municipales del Partido Popular (PP).
“Somos conscientes de que la exhumación lleva su tiempo”, apunta Castejón, pero añade que la disposición del alcalde de la ciudad, Augusto Hidalgo y del concejal de participación les ha hecho pensar con “más optimismo”. Además, conoce que las tareas posteriores requieren de una inversión elevada, por lo que ya han solicitado una reunión con el Cabildo de Gran Canaria que esperan que se pueda efectuar el próximo mes de septiembre. En este punto también coincide Millares, que expresa que la Corporación insular “debe implicarse” en este asunto.
Para llevar a cabo estos trabajos de exhumación se requiere de personal cualificado. Investigadores, arqueólogos, científicos... tendrán que llevar a cabo estas tareas para que, a su vez, se puedan realizar pruebas de ADN los familiares afectados.
“Los objetivos son buscar el mayor apoyo y financiación posible”, asegura Castejón, que añade que todos sus esfuerzos los realiza para que finalmente se pueda abrir esta fosa. Asimismo, aclara que la derogación de la Ley de memoria histórica por parte del PP “no ayuda nada a las víctimas”, ya que alega que no puede ampararse en esta norma a la hora de pedir financiación para su causa.
Compromiso con la memoria histórica
El concejal de participación ciudadana del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria aboga por que este no sea el único proyecto en el que trabaje su grupo de Gobierno. Millares asegura que entre sus planes se encuentra la de hacer el próximo año un homenaje a los fusilados, cambiar el nombre de las calles franquistas o impulsar un museo histórico en San Lorenzo.
El edil insiste en la importancia de que se hayan puesto de acuerdo ya con varias asociaciones y que juntos podrán avanzar todos estos planes.
Cabe recordar que el compromiso para efectuar estos estudios se adoptó tras diversos encuentros efectuados con las plataformas de víctimas del franquismo el pasado mes de julio con miembros del grupo municipal, donde participó el alcalde de la capital grancanaria, Augusto Hidalgo.