La asociación Ben Magec-Ecologistas en Acción denuncia que las obras que se están realizando para la regeneración de la playa de Tauro pueden afectar a la ZEC Franja Marina de Mogán, un espacio marino declarado para la protección del hábitat de interés comunitario y que se encuentra a apenas 300 metros de las obras.
El colectivo aclara que desde el comienzo de estos trabajos, hace aproximadamente un mes, y debido al movimiento y aportación de áridos finos en el perfil activo de la playa, se generan extensas plumas de turbidez que se extienden por el entorno de la bahía y se adentran en ocasiones dentro de los límites de la ZEC.
Esta situación, explican que la llevan denunciando desde hace semanas los vecinos y empresarios del entorno. Ben Magec critica además que en la ejecución de las obras “no se hayan tomado medidas correctoras al respecto, como obliga el Planeamiento en vigor (PTE-29)”. Señalan que en este documento se establece que para prevenir, reducir y contrarrestar cualquier efecto significativo sobre la calidad del agua del mar, se deberán instalar “barreras flotantes anti turbidez”, entre otras. Los ecologistas sostienen que la obras que se están desarrollando en la bahía de Tauro suponen una privatización de facto de “una de las pocas playas de uso público y libre que quedaban en esta zona del municipio”.
Las obras de regeneración de esta playa van acompañadas de la instalación de hamacas y sombrillas, lo que, según sostienen, generará unos beneficios anuales a la constructora de 113.344 euros y dará trabajo a tres personas. En contraposición, aclara que este negocio se producirá a cambio de impedir el ejercicio efectivo del uso público, libre y gratuito de la playa. Asimismo, asegura que se va a arrebatar el negocio de restauración a una familia y que se expulsará de sus casas a cientos de personas que llevan años viviendo en la trasera de la playa. Una situación que creen que se verá agravada cuando se construya el muelle deportivo que se pretende, el paseo marítimo asociado y los numerosos hoteles en el barranco de Taurito.
Por otro lado, el colectivo avisa de que el proceso para incluir a esta fanerógama marina en la categoría de “vulnerable” dentro del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y Catálogo Español de Especies Amenazadas, está a punto de finalizar. Según aclaran, se trata de un hecho que obliga a las administraciones competentes a protegerla de acciones perniciosas, más allá de los espacios naturales protegidos, como la Ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad dispone.
Ben Magec acusa a las administraciones competentes de mercantilizar nuestra costa y de connivencia en la destrucción de nuestro patrimonio natural, patrimonio natural protegido por la legislación Europea. Igualmente denuncia que este tipo de operaciones inmobiliarias degradan el tejido social de nuestros municipios y la actividad económica local de pequeños negocios familiares.