El presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Pérez, junto al vicepresidente, Román Rodríguez, el consejero de Medio Ambiente, Juan Salvador León, y el consejero de Hacienda, Luis Ibarra, entre otros representantes de la corporación insular, se reunieron este lunes con los alcaldes de los municipios afectados por el incendio que “atacó” a Gran Canaria la pasada semana: Encarnación Domínguez (Tejeda), Mari Pino Torres (San Bartolomé de Tirajana), Francisco González (Mogán) y Tomás Pérez (La Aldea de San Nicolás). El motivo de dicho encuentro es “desbloquear nuevas ayudas” y entregarlas este próximo jueves.
Antes de la reunión, Juan Salvador León rechazó las críticas sobre una posible descoordinación a la hora de intentar controlar el fuego: “tengo que comprender el cabreo de los ciudadanos porque muchos de ellos han perdido todas sus propiedades y es entendible, pero sinceramente no creo que hubiera descoordinación, al contrario, creo que si algo ha funcionado es la coordinación. Hay que tener en cuenta que este incendio es histórico, el más grande que ha habido en Gran Canaria, pero no podemos estar en absoluto de acuerdo en que hubo descoordinación porque nuestro objetivo fundamental y primordial era evitar la pérdida de vidas humanas y afortunadamente eso se consiguió. Creo que dadas las características que se dieron y las dimensiones que adquirió el incendio aquello era un infierno. Ahora hay que dar un mensaje de esperanza y tranquilidad porque recuperaremos mucho de lo que ha sido pasto de las llamas en lo que a flora se refiere”.
Luis Ibarra, consejero de Hacienda, resaltó la rápida respuesta de la corporación insular y explicaba el sentido de la reunión: “personas que solicitaron la solicitud el mismo viernes recibieron el dinero el sábado. Hay que agradecer a los funcionarios del Cabildo la celeridad que han tenido en este tema porque nos ha permitido dar este primer bloque de ayudas. Hoy el objetivo es retomar este tema para desbloquear nuevas ayudas y entregarlas el jueves. Personalmente queremos acabar con estas ayudas de emergencias para luego crear una línea de subvenciones para los que han perdido alberos agrícolas, terrenos, su poca ganadería... Fue triste porque entregar 2.500 euros a personas que han perdido su vivienda es triste, pero es simplemente para que puedan comprar lo básico, ropa, manguera, colchón, son ayudas de emergencias que son a fondo perdido, no hay que justificarlas”.
“Lo primero es responder a las legítimas demandas de restitución de lo perdido, esa es la primera tarea de las Administraciones Públicas de forma coordinada y eficaz ya que suele tener su complejidad administrativa. Por eso yo creo que estas primeras ayudas han sido un buen gesto de respuesta rápida y eficiente, son ayudas de supervivencia básica. Ahora toca coordinar ayuntamientos, Cabildo, Gobierno regional y central para que el resto de las ayudas que responderán a esas demandas ciudadanas se hagan con mucha diligencia, y más teniendo en cuenta que estamos en verano con las dificultades que conlleva en las Administraciones Públicas”, apuntó Román Rodríguez.
El vicepresidente del Cabildo quiere encontrar soluciones para que dramas como el vivido no se repitan: “después habrá que analizar todo lo ocurrido al detalle, evaluar exactamente procedimientos, tiempos, medios y organización para proponer mejoras porque de esto tenemos que aprender profesionales e instituciones y las consecuencias razonables son una política de potenciación de la protección al medio ambiente y desde luego una política de potenciar las políticas de seguridad y emergencias porque son un valor en las sociedades democráticas. Cuando tengamos las evaluaciones detalladas de orden técnico tendremos las respuestas necesarias para mejorar todo lo referido a la protección del medio ambiente y a la organización y respuesta de una sociedad moderna a situaciones de seguridad y emergencias”.
Por último, Tomás Pérez solicitó “agilidad y coordinación” a las administraciones para que los afectados reciban respusta rápida: “hoy vamos a reunirnos para valorar de forma más directa las medidas a tomar, como lo haremos también con el presidente del Gobierno. A partir de ahí intentaremos hacerlo lo más rápido en atención a las personas afectadas y que las administraciones tengan una coordinación para ser ágiles con las demandas de los ciudadanos. A nosotros no nos afectó directamente a las viviendas, ni animales pero sí afectó a la parte de Inagua y al monte bajo que llega a las laderas que llevan al valle de Tasarte y de La Aldea. Dentro de lo que pasó hay que saber que se trabajó muy duro para contener el fuego y el daño es sobre todo ecológico”.