El Cabildo de Tenerife colaborará con una ayuda de 12.000 euros para paliar los daños sufridos por Cuba tras el paso de los huracanes Ike y Gustav que han dejado cinco muertos y numerosos daños materiales.
Así lo anunció este jueves en un comunicado de prensa el consejero insular de Desarrollo Económico, Comercio y Empleo, Efraín Medina, quien despidió al cónsul general de Cuba en Canarias, Julio Álvarez que se trasladará a Madrid.
Durante el encuentro mantenido en el Cabildo, Efraín Medina explicó al máximo responsable consular que, desde que se produjeron “estos desgraciados fenómenos meteorológicos, el Cabildo de Tenerife ha estado en permanente contacto con la Asociación Canaria de Cuba y con las autoridades cubanas”.
El consejero insular manifestó que el Cabildo ofrecerá una ayuda de 12.000 euros para atender los gastos inmediatos de alimentación y salud de los descendientes de Tenerife que se han visto afectados por los huracanes.
Medina añadió que esta ayuda se coordinará con las que tiene previsto entregar el Gobierno de Canarias, a través de la Viceconsejería de Emigración, para aunar esfuerzos y recursos.
A pesar de la catástrofe, el cónsul general coincidió con el consejero insular en que “hubo suerte”, pues el plan de evacuación inmediato “funcionó”, y se consiguió desalojar a más de dos millones de habitante.
No obstante, Álvarez resaltó que la destrucción ha sido fatal en los cultivos y en las edificaciones, de ahí que lo más urgente sea ahora la reconstrucción de edificios y de las líneas eléctricas.
En cuanto a la situación de los canarios residentes en Cuba, el cónsul general confirmó que no hay constancia de que hayan sido damnificados, algo que corroboró el consejero insular quien ha estado en permanente contacto con ellos.