Los camelleros niegan maltrato hacia los dromedarios transportados a Tenerife
La Asociación de Criadores de Camellos de Timanfaya ha rechazado “con rotundidad” la denuncia sobre supuesto maltrato animal referida al transporte de camellos desde la isla de Lanzarote hasta Tenerife para su participación en la cabalgata de Reyes, y aclara que el camello, por su comportamiento, naturaleza y fisiología, tiene un “trato singular”.
A través de un comunicado, la asociación ha asegurado este lunes que los animales salieron de Lanzarote “en buen estado de salud, viajaron sin sufrir alteraciones y llegaron en perfectas condiciones al destino”. Añade que no es recomendable hacerlos viajar de pie, sino echados, y agrupándolos porque “son animales que se agrupan para descansar y es así como se sienten más cómodos”.
Afirma, además, que cuanto más pegados estén, gozarán de “mayor estabilidad y confortabilidad” dentro de la bañera de carga, e indican que los camellos “soportan bien la estabulación por unos días, tanto, que salir y entrar de un medio de transporte puede causarles más alteraciones que permanecer dentro”. Igualmente, asegura que es un animal que “puede permanecer tuchido y sin beber agua durante un largo periodo de tiempo”.
La Asociación de Criadores aclara que las cintas de sujeción utilizadas en su transporte “no afectan a la circulación de la sangre ni provocan heridas en los animales, ni en ninguna parte del cuerpo”. Y añade que para los desplazamientos es necesario presentar una solicitud y obtener el permiso de la dirección competente del Gobierno de Canarias.
En este sentido, aseguran que los camelleros afectados por la denuncia cumplieron con este trámite. “Tanto el transportista como el medio de transporte se encuentran debidamente registrados y los camellos viajaron con la cartilla veterinaria que identifica cada animal y certifica la ausencia de síntomas de enfermedad”, señalan.
Los camelleros inciden en que han ofrecido desde siempre un “trato excelente” a los animales cumpliendo con “todos los controles veterinarios”, trabajando para ejercer la profesión de forma “digna” y velando por el mantenimiento de la especie, y destacan que Uga “tiene la cabaña camellar más importante de Europa”.
Según la Asociación, su actividad, con los paseos a turistas, desde los años cincuenta, y colaboraciones puntuales en romerías y cabalgatas de Reyes en varios municipios de Canarias, ha sido “transparente y sin antecedentes de maltrato animal, como tampoco lo es en la situación que nos ocupa”.
Por último, lamentan que la falta de información sobre el comportamiento de la especie y la actividad de los camelleros derive en un denuncia que, dicen, están convencidos de que “terminará aclarándose”. Además, insisten en que respetan y cuidan la raza no sólo porque da sustento a muchas familias de la isla, sino por su significativo valor histórico y cultural.