Canarias está dispuesta a aumentar en 200 plazas la capacidad de acogida de menores inmigrantes que se propuso en 2006 (cuando se fijó en 300) a cambio de que el Estado se comprometa a colaborar en el acogimiento. La consejera de Bienestar Social del Gobierno canario, Inés Rojas, augura “un antes y un después” en la política de menores si este viernes se materializa el compromiso de la Comisión de Inmigración.
Tras meses de conversaciones entre el Estado y el Gobierno regional, parece que “de palabra todo ha ido redondo” y se está a la espera de que se reúna la Comisión de Inmigración este viernes, coordinada por la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de La Vega, para dar oficialidad a los acuerdos adoptados.
Tras la reunión se espera establecer un protocolo estable que regule la colaboración entre ambas instituciones en la acogida de menores. “Esperamos establecer un protocolo estable para que no nos veamos nunca más reclamándole al Estado que por favor tenemos los centros muy saturados de niños, si no que realmente los niños no se vuelvan a ver en esa situación”, declaró Rojas al respecto.
La consejera espera que quede resuelto el hecho de que Canarias absorbe a un gran número de niños y establecer un número máximo para garantizar su integración y que, a partir de ahí, estos niños sean derivados a las plazas previstas en cada una de las comunidades autónomas.
“Si todo sale como está previsto, y el viernes se le da un espaldarazo importante a esa política estable, a partir del viernes podemos estar hablando de un antes y un después en la política de menores de los niños que nos llegan de África”, aseveró.
Tan segura se muestra la consejera de que ese acuerdo dará sus frutos que reconoce que “no hay prevista ninguna medida” en caso de que no sea así porque, dijo: “estamos seguros de que la solución de lo que estamos proponiendo va a salir, si no, no tendrían sentido todos estos meses de diálogo”.
En estos momentos, según datos aportados por la consejera, Canarias acoge a unos 1.400 menores tutelados por el Gobierno canario. En este sentido, Rojas admitió que “Canarias puede absorber más de esos 300 niños que se estableció en 2006”. “Tenemos una infraestructura a su disposición, podemos quedarnos con un número cercano a los 500, que podríamos afrontar con garantías, más allá no podemos garantizar una integración plena a los niños”, concluyó.
Modificación de la Ley de Extranjería
En cuanto a la pretensión del ministro de Empleo e Inmigración, Celestino Corbacho, de modificar la Ley de Extranjería, Rojas recordó que eso es algo Canarias viene reclamando hace mucho tiempo. “Tenemos que modificar nuestra normativa y adaptarla a la situación que tenemos ahora en España”, dijo.
Recordó que han pasado once años desde la primera patera llegó a Canarias y que sin embargo se sigue regulando con la Ley del Menor “que en ningún momento” contempló las competencias sobre los menores que llegan en cayuco. “Debemos adaptar la ley y establecer un estatuto jurídico del menor que garantice también los derechos de estos niños una vez que están fuera de su continente”, resaltó.