Tres calles de Las Palmas de Gran Canaria continúan este viernes cerradas al tráfico después de que el jueves quedaran inundadas por la tromba de agua que se produjo en horas de la madrugada, según informó un portavoz de la Policía Local. Obispo Romo, Salto del Negro, y las inmediaciones de la iglesia San Antonio Abada, en el barrio de El Polvorín, son las tres zonas por las que no se permite el tránsito de vehículos, ya que en ellas trabajan operarios municipales de Vías y Obras.
Los hasta 50 litros por metro cuadrado que se registraron el jueves en algunas zonas de la ciudad fueron los causantes de la grieta de 150 metros de largo por 60 de ancho que se abrió en la calle Zaragoza, en su confluencia con Obispo Romo, de las cascadas de agua que inundaron la parte baja de la ciudad, y de la caída de varios muros. Pese al caos que produjo esta situación, sobre todo a primeras horas de la mañana, no hubo que lamentar daños personales.
Ante la posibilidad de que continúen las lluvias en las próximas horas, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria mantiene activo el dispositivo de emergencia aplicado el jueves.
Advertencia del Cabildo majorero
Por otro lado, el Cabildo de Fuerteventura advirtió este viernes de vientos de hasta 80 kilómetros por hora durante el fin de semana acompañados de fuertes marejadas con olas de hasta 4 metros.
La Consejería de Seguridad y Emergencias informó de que, dadas las predicciones meteorológicas y la evolución del tiempo durante toda la semana, existe la posibilidad de que se produzcan este fin de semana fuertes vientos que podrían alcanzar los 80 kilómetros por hora en las zonas abiertas al norte, fundamentalmente en la madrugada del sábado al domingo, acompañado de fuertes marejadas en determinadas zonas con olas de hasta 4 metros en la costa noroeste de la isla. El consejero del área, Guillermo Concepción, declaró que “a pesar de no haber todavía una prealerta oficial, es conveniente que la gente tome conciencia de que existe la posibilidad de que se decrete en las próximas horas, así como que en estos momentos ya hay zonas de la Isla donde el mar está batiendo muy fuerte y que por tanto la posibilidad de que se produzcan accidentes es real”.
Por todo ello, la Consejería de Seguridad Emergencias solicita que reduzcan en la medida de lo posible todas las actividades acuáticas para este fin de semana.