La tinerfeña Carla Antonelli, en su día la primera parlamentaria trans de España, abandonó este martes el PSOE como protesta ante las demoras en la tramitación de la Ley Trans, que ha vuelto a abrir grietas dentro del PSOE y en el Gobierno de coalición. “Esto nunca ha sido una cuestión de ideología, (sino) una guerra de poder”, afirma.
El alcance de la controvertida ley, que avala el cambio de sexo en el registro sin informes médicos ni tratamientos así como la autodeterminación de género, divide al movimiento feminista y a una parte del PSOE, que alerta de que esa norma “puede destrozar la potente legislación de igualdad” que existe en España, como advirtió recientemente la exvicepresidenta del Gobierno y también extitular de Igualdad, Carmen Calvo.
El PSOE sostiene que el retraso no es tal -el plazo de presentación de enmiendas se ha ampliado hasta el 26 de octubre con el apoyo de socialistas y populares- y ha atribuido a “falsos rumores que no tienen el menor fundamento” que falte compromiso en el partido con este texto.
En una entrevista a EFE, Carla Antonelli, exdiputada de la Asamblea de Madrid, afirma que, en los últimos 15 días, el PSOE ha dado “un giro” en su actitud, a lo que se suma la “metamorfosis” de algunos de sus miembros en los últimos años, pasando de “festejar” los primeros pasos de la Ley Trans a tildarla de “aberración”.
En este sentido, Antonelli ha recalcado que la actual titular de la cartera de Igualdad, Irene Montero, “copió y pegó” el texto original del PSOE, elaborado en 2017 y que de hecho era “mucho más vanguardista que el actual”, pues por ejemplo “contemplaba a los menores de todas las franjas de edad” e incluía a las personas no binarias.
“Esto nunca ha sido una cuestión de ideología, (sino) una guerra de poder. ¿De quién contra quién? Es obvio: el Ministerio de Igualdad ya no lo llevaba quien lo llevaba antes, entonces es como un sentimiento de que me roban una bandera. Pero que tú pelees por una bandera no quiere decir que tú utilices de chivo expiatorio a un conjunto de miles de personas”, declara Antonelli.
A ojos de Antonelli, las últimas decisiones del PSOE ponen en peligro el camino parlamentario de la nueva norma: “La idea es alargar el plazo de enmiendas hasta después de los Presupuestos Generales del Estado. Eso significa e implica que nos vamos a 2023. Enero no es hábil, y en febrero y marzo estamos inmersos en elecciones autonómicas y municipales, lo cual es la excusa perfecta para poner otro pero”.
“Me he sentido desprotegida”
Antonelli dice haberse sentido “desprotegida” por su hasta ahora partido de un tiempo a esta parte. “Me han insultado y me han vejado en redes, y no se ha actuado”, protesta.
“A mí una señora que es miembro del Consejo de Estado, Amelia Valcárcel, me llamó ”señor sesentero“, y las decisiones que se tenían que tomar no se tomaron”, menciona Antonelli, al tiempo que se queja de que los representantes públicos del partido “no salieron a decir ni media palabra”.
Antonelli ubica el inicio de su desencanto con el partido “hace dos años y medio”, cuando el PSOE divulgó un “vergonzoso argumentario” contra “las teorías que niegan la realidad de las mujeres”, que fue tachado de “panfleto transfóbico” por numerosos colectivos.
Entonces decidió “plantar cara hasta el final”, en un contexto en el que, asegura, se ha “abierto la veda” a la transfobia y “han aumentado las agresiones”.
“Lo que ha vivido el colectivo de personas trans en este país se recordará: cómo se miró hacia otro lado, cómo se naturalizó el odio hacia un grupo de personas. Si ahora mismo ese odio fuera contra negros o gitanos, estaríamos rasgándonos las vestiduras”, apostilla la exdiputada.
Dice Antonelli que el daño sufrido por el colectivo en los últimos años ha sido “inconmensurable”, y señala que “aquí, el que tiene la última palabra vuelve a ser el presidente del Gobierno”, a quien recuerda que es quien puede “volver a poner orden en todo este asunto”.
Su futuro, en el activismo
Tras una decisión “dolorosa, dura” y que le deja “un inmenso vacío”, Antonelli se propone ahora seguir trabajando por la aprobación de la Ley Trans desde el activismo.
Preguntada si escucharía la llamada de otra fuerza política, Antonelli sostiene que “no entra en sus planes”, si bien apostilla: “Apoyaré a todas aquellas personas que estén trabajando y estén impulsando para que (la ley) se haga verdad”.
Y respecto a una posible vuelta al PSOE en el futuro, es pronto para hablar. “Sólo pienso en hoy; bastante duro ha sido ya para mí”, concluye.